El Gil Casares, cerrado y sin destino

j. gómez SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

La gerente espera por el nuevo plan de salud mental autonómico para definir el futuro del Psiquiátrico de Conxo

22 dic 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

La gerente del área sanitaria, Eloína Núñez, avanza que «con esta ampliación pretendemos que toda la asistencia hospitalaria pública de la ciudad se realice en el Clínico y en el médico-quirúrgico de Conxo. El Gil Casares no lo vamos a necesitar». La reforma programada supondrá así el cierre de este equipamiento, integrado desde 1993 en el Complejo Hospitalario Universitario de Santiago. Sus actuales servicios se repartirán entre los citados centros, como ocurrió recientemente con hospitalización a domicilio, que pasó para el Clínico; y con cuidados paliativos, para Conxo. Y antes con laboratorios y otras dependencias.

Núñez justifica que el área de hospitalización a domicilio esté en el Clínico «porque tiene una estrecha relación con urgencias, y las urgencias están en este hospital». Y defiende que paliativos esté en Conxo por su mayor relación con la cronicidad.

La escuela infantil del Gil Casares para hijos e hijas del personal pasará para el Clínico, indica. Lo mismo ocurrirá con lo poco que queda de radiodiagnóstico, cuyo traslado se prevé agilizar; y con documentación sanitaria y las unidades de investigación y salud mental. Dermatología pasará en la casi totalidad para Conxo, sobre todo su cirugía, mayoritariamente ambulatoria y que ya se hace allí.

El Gil Casares, con unas dependencias en mal estado, en las que hubo desprendimientos en el techo, inundaciones y otros desperfectos en los últimos años, perderá así más protagonismo, hasta llegar a su cierre para la asistencia, según la previsión de la gerencia del área sanitaria. Eloína Núñez no entra a valorar que pueda utilizarse esa zona para edificar Medicina y otras nuevas instalaciones de la USC, porque «eso no compete a esta gerencia», sostiene. Queda sin destino.

El Psiquiátrico

En cuanto al cuarto hospital del CHUS, el Psiquiátrico de Conxo, «aún no está definido su futuro, estamos a la espera del nuevo plan de salud mental autonómico para tomar decisiones», adelanta Núñez, para quien este centro está «en una línea correcta», por sus instalaciones abiertas, la reducción de pacientes y la oferta de inserción con pisos tutelados, actividades de laborterapia y rehabilitación: «hay espacios adecuados y un entorno agradable para favorecer una asistencia a este colectivo de pacientes, tanto o más importantes que cualquier medicación». El Psiquiátrico tiene en estos momentos el menor número de pacientes de su historia. Alberga además servicios diferentes a salud mental.