Abren consultas a las empresas para que presenten ofertas de fibra óptica en el casco histórico

Margarita Mosteiro Miguel
Marga Mosteiro SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

SANDRA ALONSO

Las Administraciones autonómica y local conceden dos meses de plazo para entregar las propuestas

30 oct 2019 . Actualizado a las 00:31 h.

Las empresas de telecomunicaciones dispondrán de dos meses para presentar sus propuestas técnicas y económicas para la instalación de la fibra óptica en el ámbito del casco histórico, tras la resolución conjunta adoptada por la Consellería de Cultura, la Axencia para a Modernización Tecnolóxica de Galicia (Amtega) y el Concello. La apertura de la convocatoria de consulta abierta, a la que podrán presentarse todas las empresas de telecomunicaciones que lo deseen, se realiza tras la elaboración de la guía de buenas prácticas para actuaciones de tendido de la red de fibra óptica en las zonas urbanas de especial protección y conjuntos históricos, que fue realizada entre las dos instituciones.

En este documento se dedicó especial atención al caso de Santiago, por su alto valor patrimonial, y así se establece que la red en Compostela se podrá desplegar por las cornisas de los inmuebles, mediante canalización subterránea o a través de la red de saneamiento, pero se evitará que los cables cuelguen de las fachadas.

En la consulta abierta, la Consellería de Cultura, la Amtega y el Concello quieren conocer, además del interés de las empresas por instalar la fibra óptica en el casco histórico, también las soluciones técnicas para desplegar el servicio y la oferta económica de cada una de ellas. Todas las propuestas deberán remitirse a la Amtega para ser analizadas por los técnicos y seleccionar luego la que mejor responda a las necesidades de los futuros usuarios del casco histórico.

La dotación de fibra óptica es una de las principales reclamaciones de las entidades sociales, vecinales y comerciales de la zona vieja de Santiago, que consideran que la falta de este servicio limita la implantación de nuevas empresas, y contribuye a expulsar a la población del casco histórico.