La Policía usó inhibidores de drones por primera vez en el Apóstol

Xurxo Melchor
xurxo melchor SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

XOAN A. SOLER

Operaron en la plaza del Obradoiro, en la que también se apostaron tiradores de élite para evitar vuelos no autorizados

28 jul 2019 . Actualizado a las 14:25 h.

El dispositivo especial de seguridad que cada verano monta la Policía Nacional durante las fiestas del Apóstol en Santiago no deja de evolucionar y año a año incorpora novedades que lo hacen más eficaz. En esta ocasión, han estrenado un novedoso inhibidor de drones que formó parte del material que tuvieron en su poder los agentes que estuvieron destacados en la plaza del Obradoiro durante las dos jornadas más importantes de las celebraciones, las de los días 24 y 25, en las que tienen lugar los fuegos y la ofrenda.

El aparato se usa cómodamente. Tiene un mango que permite apuntar como si de una escopeta se tratara, pero en lugar de balas lo que emite es una señal que inhibe la frecuencia del dron. El sistema se complementa con otro mecanismo que lo que hace es tomar el control de la aeronave, de forma que el agente pueda hacerla descender y aterrizar sin que suponga un peligro para las personas.

Los vuelos de drones estaban prohibidos durante la celebración de las fiestas del Apóstol, por lo que cualquier aparato de este tipo habría cometido una infracción y los policías que formaban parte del despliegue en Santiago tenían orden de actuar de forma inmediata.

Al margen del inhibidor, que habría sido siempre la primera opción, también se habían apostado en puntos estratégicos de la plaza del Obradoiro tiradores de élite que tenían orden de disparar en caso de que un dron sobrevolara la zona acotada en la que estaban tanto miles de personas congregadas como también las autoridades.

Dos podían ser las distintas posibles situaciones con drones a las que podría haber tenido que hacer frente el Cuerpo Nacional de Policía en el Obradoiro. De un lado, un posible intento de atentado terrorista utilizando estas aeronaves. Y, en este sentido, es necesario recordar que España sigue en máxima alerta por la amenaza del islamismo radical en todo el país, pero especialmente en puntos de especial significación como Madrid, Barcelona y también Santiago de Compostela por su simbolismo religioso como centro de acogida de cientos de miles de peregrinos llegados de todo el mundo y como tercera ciudad santa de la cristiandad, junto a Jerusalén y Roma.

Otra posibilidad ante la que estaban especialmente advertidos y atentos los agentes desplegados en la plaza del Obradoiro es que alguien pudiese utilizar un dron para obtener imágenes aéreas de la celebración. Algo para lo que haría falta un permiso especial y que los días 24 y 25 estaba, precisamente, prohibido de forma expresa.

El dispositivo especial se saldó sin incidentes importantes y no hubo que realizar detenciones

Las fases crítica y precrítica del dispositivo especial desplegado por la Policía Nacional en Santiago con motivo de las fiestas se ha saldado sin que se registraran incidentes de importancia y sin que se tuvieran que realizar detenciones ni en la noche de los fuegos ni el día 25 durante los actos de la ofrenda al Apóstol y en las manifestaciones políticas organizadas con motivo del día de Galicia, entre ellas las de grupos partidarios de la independencia, que acostumbran a ser las más conflictivas.

Este año el dispositivo ha sido potente, ya que han llegado a estar operativos en la ciudad hasta cuatro grupos de la Unidad de Intervención Policial (UIP), los popularmente conocidos como antidisturbios. Cada uno de ellos cuenta con un máximo de cincuenta agentes, aunque también pueden trabajar con menos.

Una vez pasadas las fiestas y hasta el final del verano, la UIP seguirá presente en Santiago lo que queda de verano, aunque ya no contará con cuatro grupos. Tampoco estarán presentes los miembros de otras unidades especiales que formaron parte del despliegue especial por el Apóstol, como los Grupos de Operaciones Especiales (GOES), los tédax o las unidades de subsuelo, de guías caninos o el helicóptero policial, que fijó su base en Lavacolla. Sí seguirá operativa la unidad de Caballería, que operará en la campaña antiincendios y en la vigilancia del Camino.