Joyas del año 1900 salieron del baúl en el Día do Traxe Galego

Patricia Calveiro Iglesias
P. Calveiro SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

Unas cuatrocientas personas participaron en el desfile matinal en el casco histórico, según estimó la organización

21 jul 2019 . Actualizado a las 22:43 h.

Pololos, dengues, corpiños, calzas, fajas y monteras. O Día do Traxe Galego sirvió de excusa para desempolvar los conjuntos de gala y faena tradicionales, y lucirlos por la calle. Cerca de 400 personas hicieron lo propio para participar en el desfile desde la Alameda hasta San Paio de Antealtares, según las estimaciones de la organización. Se trataba esta de una edición especial, pues se cumplía el 40.º aniversario de la cita impulsada por la Asociación do Traxe Galego. Y su presidenta, Pilar Astray, celebró tanto la alta asistencia como la calidad de las vestimentas que se sumaron ayer a la fiesta del traje.

«A participación foi impresionante. Había moitísima xente. Estamos moi contentos, porque o número de participantes vai aumentando de ano en ano. E, ademais, a xente estase esmerando moitísimo nas vestimentas e cada vez a calidade é maior», subrayó Astray. Hasta tres generaciones, desde niños de dos años, a sus padres y abuelos, secundaron la cita que puso la nota de color por las calles de Compostela.

En el certamen de trajes compitieron cerca de una docena de concursantes, uno de los cuales era un grupo formado por diez personas. En el concurso, que incluía el ya habitual desfile A Quintana, había verdaderos objetos de coleccionista, incluidas joyas textiles del año 1900 que fueron rescatadas de los baúles para el Día do Traxe Galego. Por su valor histórico destacaban cuatro piezas antiguas, de comienzos del XX, que formaban parte de un traje de novia de la época, todavía en buen estado de conservación. «Son pezas sinxelas, pouco ornamentadas, pero con un corte excepcional que senta de marabilla», explicó Pilar Astray.