Hay páginas web especializadas donde se pueden encontrar información
15 jul 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Cada vez son más los establecimientos hosteleros que permiten a sus clientes disfrutar de la compañía de sus mascotas cuando se van de vacaciones. Las condiciones requeridas por estos negocios - que se encuentran con facilidad echando un vistazo a páginas web especializadas, como redcanina.es, dogvivant.com o SrPerro.com - pueden variar sustancialmente. Algunos cobran suplementos y otros no. Además, algunos establecimientos prefieren evitar la entrada de canes de razas determinadas o que excedan un límite de peso. En cualquier caso, hay para todos los gustos y bolsillos.
Una opción para alojarse con el perro en Santiago de Compostela es el Hotel Santa Clara. Modesto -de una estrella- pero completo y bien valorado, cuenta con una localización privilegiada, a 700 metros del centro y un tiro de piedra del casco viejo. Además, a 20 minutos a pie podemos encontrar un bar de moda que también permite el acceso de perros: O Sendeiro, situado en el histórico barrio del Sar.
El Hotel Santa Clara contempla el acceso de todo tipo de perros, sin importar su raza o peso y sin requerir aviso previo. No cobra suplemento y permite a los animales circular sin correa por todas sus instalaciones. Desde recepción añaden que nunca han tenido problemas derivados de esta permisividad. «Son siempre muy buenos», señalan.
En A Coruña, donde las alternativas se disparan, un hotel a considerar es el Mar de Plata. De dos estrellas, ofrece habitaciones con vistas a la playa de Orzán. A apenas 500 metros está La Consentida, un bar de copas también petfriendly. En este caso, el hotel pide un aviso previo porque no aceptan perros de más de 15 kilos -transportín incluido -. Tienen prohibido, además, el acceso al comedor y han de ir con correa por el resto de instalaciones. Los perros potencialmente peligrosos están obligados a llevar bozal.
Al aire libre
Pero no todo van a ser hoteles. Sin ir más lejos, en el cámping O Raso, en Ares, cerca de Ferrol, admiten la entrada de mascotas de todo tipo, así como su presencia en las zonas comunes. Y aunque la playa situada junto al cámping no permite el acceso a los perros, a algo más de tres kilómetros, junto a las instalaciones del Club de Remo de Ares se encuentra una playa canina, territorio reservado para ellos.
Cada recinto hostelero cuenta con sus propias normas para
los canes
Los cámpings son una opción que permite un mayor contacto con
la naturaleza