Llegan a Santiago los primeros saharauis que pasarán el verano junto a familias de acogida gallegas

Patricia Calveiro Iglesias
P. Calveiro SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

El programa «Vacacións en paz» permitirá a 330 niños acceder a revisiones médicas y mejorar durante dos meses su calidad de vida

07 jul 2019 . Actualizado a las 22:22 h.

La aventura ha comenzado, un año más, para los 330 niños refugiados del Sáhara que pasarán el verano en Galicia a través del programa Vacacións en paz. La mitad de ellos llegaban esta mañana al aeropuerto de Santiago tras un largo viaje desde Argel, el cual comenzó el día anterior en la furgoneta que recorrió el campamento y acabó en las casas de las familias que acogerán a los pequeños de entre 9 y 12 años.

Los nervios se apoderaban de los menores que vienen por primera vez para encontrarse con un continente nuevo y una realidad muy distinta a la que conocían, mientras aquellos que repiten la experiencia contaban los minutos para abrazar a las familias gallegas con las que convivieron los pasados años. En el autobús que va del aeropuerto a los puntos de encuentro, los ánimos se dispararon entre los saharauis, que hicieron el trayecto cantando y llenos de expectación.

La asociación que promueve Vacacións en paz, Solidariedade Galega co Pobo Saharaui, se había propuesto un ambicioso reto para este verano, conseguir 150 nuevas familias de acogida y lo da por cumplido. Así, participan este año en el programa 45 niños más que en el 2018. El segundo vuelo, con el resto de menores, llegará el martes por la mañana a Lavacolla. Por delante quedan dos meses, hasta que toque el regreso. Durante este tiempo, los pequeños tendrán un respiro de los 50 grados que soportaban en los campamentos de refugiados, al tiempo que podrán acceder a revisiones médicas y mejorar notablemente su calidad de vida junto a las familias de acogida.

Un acuerdo con el Sergas permite que disfruten de cobertura sanitaria durante su estancia en Galicia, donde el primer grupo fue recibido en el aeropuerto compostelano por el conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuiña. Esto hace posible que muchos de los menores que nunca se han hecho análisis puedan detectar posibles enfermedades, desde diabetes o celiaquía a otros problemas; realizar una revisión ocular; ir a su primera visita al dentista o someterse a una operación quirúrgica con todas las garantías, en el caso de que sea necesario.