Defienden que los pacientes participen más para mejorar el sistema de salud

j. gómez SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

XOAN A. SOLER

Carlos Mur presentó en el congreso de medicina que se celebra en Santiago un estudio sobre competencias en gestión sanitaria

10 may 2019 . Actualizado a las 11:14 h.

Los últimos años se admite que pacientes informados y expertos sean coprotagonistas del proceso terapéutico. Y se defiende asimismo «que participen más para mejorar el sistema de salud los pacientes, las personas con discapacidad y asociaciones que les representan, que deben compartir un modelo de toma de decisiones responsables, y tener voz en la gobernanza de las instituciones sanitarias. Aún no se ha incorporado suficientemente la calidad percibida y la experiencia de los usuarios como un ingrediente para obtener evidencias robustas, datos objetivos que nos permitan mejorar el servicio. Es algo que progresivamente debe desarrollarse, y el papel del paciente debe ser absolutamente fundamental», afirma Carlos Mur, director gerente del Hospital Universitario de Fuenlabrada (Madrid) y vocal de la junta directiva de la Sociedad Española de Directivos de la Salud.

Mur presentó, en el 21 Congreso Nacional de Hospitales y Gestión Sanitaria, el estudio Validación Española del Directorio Internacional de Competencias en Gestión Sanitaria. Este trabajo se promovió porque «la profesión de gerente de hospital y de directivo de la salud como tal no está regulada en España. No está reconocido qué titulación o formación se necesita para ejercer esos puestos, ni está suficientemente reglamentado cómo elegir los mejores directivos por igualdad, mérito, capacidad y libre concurrencia; y para garantizar la transparencia y el buen gobierno de las organizaciones», sostiene.

No hay un único canal formativo, una única titulación ni un único organismo evaluador de directivos de la salud, sostiene Mur. El estudio que presentó ayer en Santiago resalta que, entre 85 directivos consultados, destacaron el interés del buen liderazgo, tener habilidades para transmitir y competencias en comunicación «y conocimientos en asistencia sanitaria y salud pública, que deben ir de la mano con conocimientos empresariales y de las normativas», indica.

La mayoría de los directivos sanitarios en España son médicos y otros sanitarios. Les siguen especialistas de los ámbitos jurídico y económico. «Es complicada la gestión económica y la de recursos humanos. Las limitaciones presupuestarias cuentan mucho, y problemas estructurales que restan agilidad y eficiencia. Pero la clave en este sector es la gestión de personas: hay una mayoría de profesionales muy bien formados, pero hay que saber motivarlos. Es difícil encontrar organizaciones con tanto personal cualificado como en un hospital, y con un nivel de tecnología tan elevado, y que se dedique al mismo tiempo a conseguir resultados tan complejos como es mejorar la salud humana».

Carlos Mur valora como un avance «las área integradas de gestión de atención primaria y hospitales, que en comunidades como el País Vasco o Castilla y León se están mostrando exitosas para gestionar los recursos de forma eficiente».