Ya están aparcados junto al Multiusos de Sar, que acogerá esta noche su concierto en Santiago, los buses en los que viajan las cerca de 40 personas con el legendario músico de Minnesota
29 abr 2019 . Actualizado a las 14:44 h.Es sabido que Bob Dylan no es amigo de las cámaras. Es todo un maestro del despiste, en el noble arte de dar esquinazo a los fans que intentan averiguar el hotel en donde se hospeda para hacer guardia, en busca de un autógrafo o de una foto. Es también un escapista de los fotoperiodistas, que andan tras sus pasos en España desde que el jueves ofreció su primera actuación en Pamplona, dentro de su interminable gira Never Ending Tour (arrancó en 1988), ahora rebautizada Live in Person. Todo apunta a que el autor de Like a Rolling Stone ya llegó a Compostela, donde actuará esta noche. Esta mañana, ya estaban aparcados junto al Multiusos de Sar, recinto que acogerá el espectáculo, los camiones que transportan el material y los buses (sleepers, con camas) en los que viajan las cerca de cuarenta personas que lo acompañan en el tour, entre músicos, técnicos y otro personal. Van a bordo de unos autobuses rotulados de Beat the Street, empresa austríaca especializada en transportar al show business, a la que suele recurrir Dylan (entre otros) en sus giras europeas.
También llama la atención la cocina instalada bajo una carpa en el exterior del Multiusos, con todo tipo de electrodomésticos industriales y la vajilla completa para alimentar al personal. Dylan viaja con su propio chef y, entre las necesidades que trasladó a la productora responsable de su concierto en Santiago, estaba hacer hoy una compra de producto fresco en el mercado local, por lo visto, una costumbre habitual. ¿Dónde se hizo? No se sabe, pero se admiten apuestas.
La gran incógnita ahora es, ¿dónde se esconde Bob Dylan? Se sabe que abandonó el Môderne Hotel de Gijón ayer hacia las siete de la tarde, un par de horas antes de su concierto en Asturias, con el check out hecho. Todo apunta, por tanto, a que al acabar la actuación de ayer por la noche, tomó rumbo a Santiago, tal y como hizo al finalizar su show en Bilbao. Pero, no ha trascendido hasta ahora si se alojó en Compostela (parece que sí) ni dónde lo hizo. Muchos están pendientes hoy de si, por fortuna, sus caminos se cruzan con el cantante estadounidense y Nobel de Literatura, quien la semana pasada se dio un paseo por la Taconera de Pamplona. Eso sí, con la capucha puesta, gafas de sol y un look que difícilmente dejaba adivinar que una de las mayores estrellas de la música estaba tras él.
