Más familias demandan ante el Cegadi plazas residenciales para personas con discapacidad

J. G. SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

cedida

La protesta iniciada por la ANPA de A Barcia y después otros dos centros de Santiago deriva en una plataforma con más municipios del área sanitarias

31 mar 2019 . Actualizado a las 12:53 h.

Familias de personas con discapacidad se concentraron esta mañana de nuevo ante el Cegadi, un centro edificado por la Xunta en Salgueiriños, para demandar que se habiliten en sus instalaciones plazas para atender al colectivo. Las instalaciones del Cegadi abrieron el año pasado, pero solo para servicios burocráticos, y reclaman que se pongan en funcionamiento sus plazas residenciales.

Esta protesta ante la Cegadi la inició hace unos meses la Asociación de Nais e Pais do Alumnado (ANPA) del colegio de educación especial público compostelano de A Barcia. Evidenciaban así su preocupación por las necesidades de atención de sus hijos e hijas al cumplir 21 años, cuando finaliza el período de escolarización obligatoria en ese centro. El 4 de marzo se sumaron representaciones de familias que envían alumnado a otros dos centros de Santiago: el también público López Navalón, de O Pedroso; y del promovido en Lamas de Abade por la asociación Aspanaes, de padres y madres de personas con espectro autista.

Las últimas semanas se han sumado además familias de otros municipios del área sanitaria, como Lalín, Oroso, A Estrada, Noia, Ames, Teo, O Pino y Outes. Esta mañana acudieron familias de Teo, Santiago, Milladoiro (Ames), A Estrada, Negreira e O Pino; y representaciones de las comunidades escolares de centros como Aspamite, Aspanaes, Down, colegio público de Vite, y de colegios de educación especial compostelanos de A Barcia y López Navalón

Ante esta creciente participación han decidido constituir una plataforma, para unir esfuerzos en esa reivindicación de interés común. María Xunqueira, presidenta de la ANPA del centro de A Barcia se muestra satisfecha de la asistencia a la concentración de este mediodía, aunque resalta la dificultad de muchas familias para acudir, por la exigencia de atención de sus hijos con discapacidades y la asistencia que deben prestarles de forma continuada.