Álvaro Iglesias, de músico callejero a actuar en la Capitol junto a Andrés Suárez
SANTIAGO CIUDAD
El joven compostelano será el telonero del cantautor ferrolano en el concierto que ofrecerá en acústico en Santiago
25 ene 2019 . Actualizado a las 16:17 h.«Fui músico callejero. A mí me ayudó mucha gente y si puedo devolver esa ayuda que recibí y hacer que más personas conozcan a otros músicos callejeros, lo hago». Lo dice Andrés Suárez, que puso banda sonora a las calles compostelanas en sus inicios y ahora cuelga carteles de «sold out» en sus giras, como hará el viernes y el sábado en la Sala Capitol con las entradas agotadas desde hace días. Con esa intención de colaborar con otros músicos que tocan en la calle, puso en marcha Abriendo ventanas, una iniciativa en la que les ofrece oportunidad de abrir sus conciertos. Y este viernes dará el testigo a Álvaro Iglesias Seoane (Santiago, 1995), que en los últimos seis años actúa en la zona vieja, especialmente en el arco del Palacio, la Praza da Quintana y la Rúa do Vilar.
«He ido a un montón de conciertos en la Capitol y pasar de estar entre el público a subirme al escenario era algo inimaginable y más teniendo en cuenta que será con Andrés Suárez», explica el joven músico compostelano, que afronta «con mucha ilusión» este concierto. No será la primera vez actúe en la sala -porque tocó a finales de septiembre en el marco de una iniciativa solidaria-, pero mañana por la noche será muy diferente con el aforo lleno.
Aunque Álvaro Iglesias asegura que «es menos pasional» que Andrés Suárez en sus canciones, hay paralelismos. Los mayores, que los dos tenían claro desde pequeños que lo suyo era la música y el haber sido músicos callejeros en Compostela. «Empecé con ocho años a tocar la guitarra pero ya desde los cinco quería ser músico», explica el joven compostelano, que «veía a Antonio Recuero tocar en la calle y siempre quería ser como él». Por eso, hace seis años, un poco antes de comenzar sus estudios en el Conservatorio Superior de A Coruña en la especialidad de interpretación de guitarra clásica, se sacó la licencia para que sus canciones sonasen en el casco histórico. Así, aprovecha el tiempo que le deja su formación académica para salir con su guitarra.
Experiencia vital
Pero, ¿qué le aporta actuar en la calle a Álvaro Iglesias? «Ya forma parte de mí. Santiago es una ciudad de turismo y acabas haciendo amigos, los peregrinos te cuentan sus historias, conoces mucha gente... Eso también te forma», explica el joven intérprete. Le gusta tocar más en invierno, pero últimamente lo ha hecho menos, dos resfriados unidos a los exámenes se lo impidieron. Ahora su prioridad, apunta, es concluir sus estudios y quiere preparar un gran concierto de fin de carrera para luego poder dedicarse a la composición. ¿Su estilo? «Todavía estoy en proceso de encontrarme. Escucho mucha variedad de música», responde. Entre ella, como no, la de Andrés Suárez. «No lo conocí cuando tocaba en la calle, pero lo sigo desde hace cinco o seis años», explica el joven guitarrista, al que le «encantaría» seguir los pasos del cantautor ferrolano. Eso sí, por el momento, aún ve lejano el disco propio.
Por lo de pronto, mañana Álvaro Iglesias tendrá la oportunidad de interpretar algunos temas propios ante el público de Andrés Suárez, a lo que añadirá alguna versión -en la calle apuesta más por estas últimas-. Además, ambos artistas también compartirán escenario en la Sala Capitol en uno de los temas del repertorio del ferrolano.
Gran potencial
La elección de Álvaro Iglesias para abrir el concierto se gestó a principios de año después de que sus amigos le avisasen de que Andrés Suárez había emprendido a través de Instagram una iniciativa destinada a artistas callejeros. Su vídeo conquistó a los seguidores de la cuenta y al propio cantautor. «Fue por decisión popular y yo quedé absolutamente fascinado. Tiene un nivel musical alucinante, es un artistazo y va a tener mucho que decir», asegura Andrés Suárez, que mañana actuará en acústico y el sábado ofrecerá un concierto con la banda, en ambos, incluyendo sorpresas. «Estoy nervioso y muy feliz por sentirme tan querido en mi tierra», afirmó el autor del disco Desde una ventana. De esta forma, mañana será una noche especial para Álvaro y para Andrés. Un nuevo paralelismo.