«De cada 20 que recuperan puntos, como mucho hay dos mujeres»

Joel Gómez SANTIAGO

SANTIAGO CIUDAD

PACO RODRÍGUEZ

09 dic 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Las principales causas de pérdida de puntos en Santiago es por conducir bajo efectos de drogas, de alcohol, o por exceso de velocidad. En esos delitos la mayoría de las personas sancionadas son, con diferencia, varones. Les siguen, con tendencia a aumentar, las sanciones por distracciones, sobre todo por uso del teléfono móvil y wasap «y en este caso hay más igualdad entre hombre y mujeres que quieren ver el mensaje mientras conducen. Por eso se pueden perder ahora 3 puntos y se pretende duplicar, aunque es una medida que está sin aprobar. Pero preocupa mucho el riesgo que supone usar el teléfono mientras se está al volante», afirma Jesús Cernadas, formador de conductores.

Jesús es profesor de autoescuela y docente de los dos centros de recuperación de puntos del carné de conducir de Santiago, el que comenzó hace años en el Polígono do Tambre y el abierto en octubre en Cruceiro do Sar: «ambos trabajan bien, organizan entre 2 y 3 cursos al mes, entre recuperación total y parcial. Lo máximo son 20 alumnos. La tendencia continúa la misma que los últimos años: de cada 20 personas que recuperan puntos, como mucho hay dos mujeres, y acuden más a los cursos de recuperación parcial. En los de recuperación total hay casi exclusivamente varones», explica.

Suelen ser también mujeres quienes, a pesar de tener del carné de conducir aprobado, piden de nuevo hacer alguna práctica en una autoescuela antes de empezar a guiar un coche: «lo hacen sobre todo mujeres que se incorporan a trabajar, precisan comprar un coche y empezar a usarlo habitualmente después de años sin hacerlo, y no quieren volver de repente».

En eso, como en las infracciones «la mujer parece más cauta al coger el coche, mientras que el varón es más atrevido, sobre todo después de consumir drogas o alcohol en exceso: eso explica que pierdan más puntos, que prácticamente todas las sentencias judiciales por alcoholemias sean de hombres que no se lo pensaron mucho a pesar de beber de más, cuando podían optar por otras alternativas, o por un taxi».

Respecto a aprender a conducir, «no se observan diferencias entre sexos. La mayor dificultad es saber anticiparse y prever situaciones, saber ver el peligro, hay que inculcar técnicas de anticipación y de gestión de espacios. Y a muchos novatos les cuesta cambiar malos hábitos aprendidos en casa o con amistades, y hacer correctamente las rotondas, los stop o ceder el paso correctamente», indica.