Dos investigadores de la USC aspiran a ser los mejores divulgadores científicos
SANTIAGO CIUDAD
Responderán en un concurso a preguntas planteadas por estudiantes en Internet
28 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Hay científicos que están presentes a diario en los medios de comunicación, y hay otros que investigan en el silencio de sus laboratorios. Y no es mejor el trabajo de los primeros que el de los segundos; la diferencia, es que los primeros saben comunicar. Cada día se le da más importancia a la divulgación científica, y con el objetivo de promover esa comunicación en ambas direcciones -que el investigador aprenda las pautas de la divulgación y que los estudiantes de enseñanzas medias se acerquen a la ciencia- se ha puesto en marcha un concurso en el que, a través de Internet, los alumnos plantean sus dudas científicas a los investigadores y estos les responden tratando de adaptarse a la edad y los conocimientos de sus interlocutores. Somos científicos, ¡sácanos de aquí! es una iniciativa de Fecyt, EduCaixa y la Obra Social La Caixa en el que este año participan dos investigadores de la Universidade de Santiago: Andrea Muras y Alejandro Gómez.
Alejandro Gómez Pazo, del departamento de Xeografía de la USC, forma parte del grupo de investigación Ambiosol, en el que estudia las dinámicas de las costas rocosas. Supo del concurso por Pablo Rodríguez Mos, investigador de Cartagena que trabaja en Barcelona. «Xa o seguía porque é moi activo nas redes sociais e ten unha páxina web de divulgación na que fala de aspectos como o cambio climático. A min sempre me interesou a divulgación e animeime a participar».
Andrea Muras Mora es especialista en microbiología y estudia en el Aula Cibus de la USC las interrelaciones entre bacterias, una investigación clave para avanzar en la prevención de enfermedades. «Fun a un curso de monólogos científicos, pensei que era algo interesante e decateime de que había xente que vivía diso». Se animó a probar en las redes sociales y comprobó que la divulgación le gustaba. «Pero daráseme ben?», se preguntó. El concurso es una buena oportunidad para comprobarlo. «Presenteime o ano pasado pero non me colleron». Esta vez, sí.
Los colegios e institutos que participan han hecho llegar ya sus peticiones y ellos se preparan para la prueba, que consistirá en colocarse delante del ordenador a la hora convenida y resolver las cuestiones que les plantean los chicos. Hay grupos mixtos de seis o siete concursantes a los que los estudiantes les podrán preguntar todas las dudas que se plantean en distintos ámbitos de las ciencias, desde la dinámica de las costas rocosas hasta el tiempo que hará mañana.
El concurso se desarrollará del 5 al 16 de noviembre, y en ese tiempo, los estudiantes votarán a favor del científico que, a su entender, mejor haya respondido a sus preguntas, con el fin de que su favorito gane un premio en metálico que luego será invertido en más divulgación. Unos participarán en la Zona Cazador de Cerebros, con especialistas en los temas tratados en el programa El cazador de cerebros, conducido por Pere Estupinyá, mientras que la Zona Cerebrum estará dedicada a la investigación en neurociencia e inteligencia artificial.
Otra mirada
Los dos investigadores están entusiasmados con el reto. Andrea Muras es consciente de que «para divulgar tes que saber moi ben do que estás a falar», pero ella tiene con quien practicar en familia. «Meu sobriño, que xa me pregunta quen gañaría se hai unha pelexa entre bacterias». Y Alejandro Gómez es consciente de que las respuestas se tienen que adaptar a la edad de los concursantes. «Por suposto, obrígache a enfrontarte á información científica con outra mirada, porque non é o mesmo o que ti dis que o que o outro entende».
La rueda de la ciencia que tanto añoraba Ramón y Cajal está ya en marcha.