Las visitas gratuitas al Pórtico implicarán más horas al mes que las fijadas por ley

El interés que ha levantado el Pórtico de la Gloria tras su restauración no toca techo. Tras un verano de acceso libre y gratuito a la obra culmen del románico europeo, visitada por cerca de 80.000 personas en 54 días, la decisión de establecer un nuevo modelo de apertura a partir del 1 de diciembre se ha topado con la oposición de un sector de la sociedad y del ámbito político. El varapalo definitivo fue el acuerdo del Parlamento gallego -a raíz de una iniciativa del PSdeG- que consiguió la unanimidad de la Cámara el jueves de la semana pasada. Este instó a la Xunta a acordar con la Iglesia la implantación de una entrada a coste cero «al menos cuatro días al mes, para así cumplir la Ley 5/2016 del patrimonio cultural de Galicia». La cuestión es, ¿cumple la fórmula de visitas al Pórtico fijada para finales de año la norma autonómica o se verá obligada la Catedral de Santiago a cambiarla?.

LO QUE DICE LA LEY

Cuatro jornadas al mes y cuatro horas por día. La ley del patrimonio cultural gallego se refiere en su capítulo primero al acceso a los bienes de interés general (BIC), declaración que obtuvo en 1896 la Catedral. En su artículo 48, establece que «se permitirá su visita pública gratuita un número mínimo de cuatro días al mes durante, por lo menos, cuatro horas al día, que serán definidos previamente». En la práctica, esto supone 16 horas mensuales de acceso gratis.

Qué propuso la catedral

Más horas gratis. Hace dos semanas, la Fundación Catedral detalló en qué consistirá el modelo que los técnicos han ideado para ver el Pórtico a partir de diciembre, una vez que el Instituto de Patrimonio Cultural complete la fotogrametría de la obra del maestro Mateo para documentar los resultados de su restauración y que se encapsule a fin de protegerlo de cara a las tareas de rehabilitación que habrá en el interior del templo. A partir de entonces, según el plan anunciado, se realizarán visitas con un guía y se cobrará una entrada general de 10 euros (con precios reducidos para distintos colectivos).

Además, se fijó el acceso gratuito para un grupo de peregrinos al día, previa retirada de invitación en la Oficina del Peregrino. Esto supondría ya entre 21 y 28 horas mensuales, teniendo en cuenta que se hablaba de visitas de 45 minutos por grupo y llevaría otros 15 el desplazamiento que exige entrar a través del pazo de Xelmírez. A ellas habría que sumar, cada domingo, el acceso gratuito reservado para otros dos grupos de compostelanos. El cómputo total se eleva a entre 27 y 36 horas mensuales, muy por encima de las 16 que contempla en la práctica la ley del patrimonio gallego.

Punto de colisión

El reparto. El modelo de visitas articulado por la Catedral cumple con el punto de partida que exige la legislación gallega de una entrada gratuita al menos cuatro jornadas al mes, como requería también el acuerdo parlamentario. Es más, la permite todos los días del año, de lunes a domingo. El problema está en el reparto que se hace de esas horas. Estrictamente, la norma autonómica estipula un mínimo de cuatro horas al día (condición que no figura explícitamente en el texto aprobado el mes pasado por los diputados de la comisión de Cultura), sin embargo como máximo la Catedral ofrecería tres horas de entrada gratis en el caso de los domingos, entre los dos turnos de compostelanos y el de peregrinos. Se trata de una cuestión puramente técnica, pues el resultado a final de mes no compromete la accesibilidad gratuita que busca garantizar la norma, si bien la fórmula elegida incumpliría por su discontinuidad en el horario de balde.

El resquicio legal

Espacio musealizado. Aún teniendo en cuenta todo lo anterior, el Pórtico de la Gloria no solo se encuentra en un inmueble declarado como BIC, también forma parte de un espacio musealizado privado, como recordó tras saltar la polémica el deán de la Catedral, Segundo Pérez. Y la propia ley de patrimonio del 2016 fija un apartado concreto que atañe al acceso a los museos públicos (el artículo 116), el cual exige garantizar el acceso a la ciudadanía, con especial atención a las visitas escolares, sin entrar en más especificaciones. Con todo, la gestión del Museo Catedralicio es competencia de la Fundación Catedral.

El acceso universal, en entredicho al restringir a tres colectivos la opción de entrar sin pagar

Más allá del número de horas de apertura gratuita del Pórtico de la Gloria, también se ha cuestionado la universalidad del acceso. El acuerdo parlamentario al que se llegó la semana pasada reclama una visita cultural y turística «libre y gratuita» tanto para el monumento compostelano como para las catedrales de Mondoñedo, Ourense y Tui. Y la ley de patrimonio cultural habla de «visitas públicas gratuitas» en el caso de los monumentos declarados como BIC, lo que podría entenderse como accesibles a todos y sin restricciones, en contra del plan previsto por la Fundación Catedral.

Los privilegiados

Compostelanos, peregrinos y Amigos del Camino. De acuerdo al sistema presentado hace dos semanas, solo tres colectivos tendrían la opción a ver el monumento sin pagar. Estos son los propios vecinos de Compostela, los peregrinos y los Amigos de la Catedral, lo que supone haber participado activamente en la conservación y restauración del patrimonio catedralicio con aportaciones, ya sea por parte de personas a título particular, de establecimientos hosteleros, comercios o de entidades. Aunque se establecen precios reducidos para grupos escolares, jubilados, estudiantes o desempleados, quedarían igualmente excluidos del anterior conjunto de privilegiados, junto al resto de visitantes.

La reacción

Comunicado de la Catedral. En respuesta a la controversia generada a nivel político y social tras anunciar la nueva fórmula de entradas al Pórtico, la Catedral ha decidido pronunciarse a través de un comunicado y se espera que se haga público esta misma semana. La gran incógnita es si dará un paso atrás y cambiará el sistema de visitas o mantendrá el rumbo según el plan inicial.

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