La vuelta al colegio provoca retenciones de tráfico en las inmediaciones de los centros educativos

Marga Mosteiro / Natalia R. Noguerol

SANTIAGO CIUDAD

Natalia R. Noguerol

Los alumnos del colegio Arcediago de Santiso no van a clase, en protesta por la falta de un profesor

12 sep 2018 . Actualizado a las 12:08 h.

El regreso a las aulas se está dejando notar en las calles de la ciudad. Si bien, a primera hora de la mañana, las entradas fueron mucho mejor de lo esperado al escalonarse el inicio de las clases en los colegios públicos y concertados (los privados comenzaron ya el lunes), a media mañana coincidiendo con la salida del colegio en algunos centros educativos, el tráfico en el centro de la ciudad se resintió bastante más. En la zona de Virxe da Cerca y praza de Galicia, los coches de los padres que iban a recoger a sus hijos, después de las presentaciones y unas pocas horas de contacto con las aulas, provocaron retenciones en el entorno de los colegios de la zona. El conflicto volvió también a Galeras tanto a primera hora de la mañana como en el resto del día.

Protestas en Santiso 

En general, el regreso a las aulas transcurre con normalidad en Santiago, salvo en Fontiñas y Monte de Gozo donde siguen ejecutándose algunas obras de mejora en los centros. En Santiso, en cambio, los padres se concentraron ante las puertas del colegio de Arcediago, en protesta por la eliminación de un profesor de Primaria.

 «Indalecio, cumpre co teu compromiso. Ensino digno no rural», reza la pancarta que la ANPA del centro colgó en la puerta del centro escolar en alusión al compromiso adquirido, hace dos años, por el jefe territorial de Educación, Indalecio Cabana. Entonces, los padres del colegio de Arcediago inciaron una campaña de protesta por iguales motivos que ahora, y Educación cedió asignando al centro un tercer docente de Primaria con el compromiso de su jefe territorial de que lo mantendría mientras se mantuviese la matrícula y él en el cargo. Los alumnos este curso suman 39 de edades comprendidas entre los 3 y 12 años, los mismos que el año pasado, pero la plaza no se ha cubierto por ahora.