La mejora de los accesos del Camino transformará el centro de Conxo

R.M. SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

PACO RODRÍGUEZ

El frente del Psiquiátrico y de la iglesia del barrio se reformulará como una plaza

19 jul 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El núcleo histórico de Conxo mudará sustancialmente con el plan de mejora de las rutas jacobeas en los accesos a la ciudad, en el que la Xunta invertirá más de cinco millones de euros desde el 2019. El barrio ganará una plaza justo delante de la iglesia y del Psiquiátrico, el antiguo monasterio, un espacio que ahora mismo está tomado por vehículos, con diferentes niveles y separado por un muro. Su reforma en un ámbito con un tratamiento único y accesible será la actuación más singular del programa de intervención en la entrada del Camino Portugués en la ciudad, que mudará también la movilidad en Benéfica e incorporará un aparcamiento al lado del centro de salud con 75 plazas para compensar la pérdida de ese uso en el Campo de Conxo.

El proyecto de mejora e integración paisajística del Camino tendrá en ese punto su reordenación más ambiciosa, según el avance que ayer presentaron la conselleira Ethel Vázquez y el director de la Axencia Galega de Infraestructuras, Francisco Menéndez, con ocasión de la exposición pública del proyecto básico para el Camino Portugués y de la del Francés en el tramo comprendido entre el monte del Gozo y el paso de la AP-9.

La intervención en Conxo calmará el tráfico en su núcleo histórico, aunque no será solo por la construcción de lo que la conselleira calificó como «a pequena praza do Obradoiro» del barrio, sino por la restricción también de la circulación en dirección subida desde Benéfica, donde a la altura de la entrada de Televés se construirá una glorieta para desviar ese tráfico por la rúa Roláns, en cuyo cruce se expropiará una casa. Con la reforma, la subida por la calle Campo de Conxo (frente a la iglesia) se limitará a vehículos autorizados, entre ellos los de residentes y el transporte público. En buena parte de Benéfica se ensanchará el paso para peregrinos, aunque el tratamiento homogéneo y la mejora de la accesibilidad y seguridad en las entradas de las rutas jacobeas se notará ya desde Torrente. También en la rotonda de Conxo. La Xunta invertirá 2,1 millones en este proyecto, el doble de lo que requiere la primera fase del Francés, entre el monte del Gozo y San Lázaro.

En este caso se expropiará un eucaliptal de más de 3.500 metros cuadrados frente a la iglesia de San Marcos que obliga a los peregrinos a ir por la carretera, para convertirlo en un bosque autóctono. Además de ese bosque, las intervenciones más singulares en este tramo de la principal ruta jacobea permitirán sustituir las escaleras del trazado por una rampa y reurbanizar el final de la bajada con la intención no solo de «crear e reforzar a imaxe de identidade común» en torno a los caminos de Santiago, sino también de hacer más agradable, seguro, accesible y funcional el tránsito de los peregrinos y «acadar a excelencia» en su experiencia, según Ethel Vázquez.

Las expropiaciones entre ambas proyectos sumarán más de 5.400 metros cuadrados y los afectados podrán formular alegaciones hasta el 17 de agosto.

Las obras se licitarán a final de año para ejecutarse desde el primer semestre del 2019

Los proyectos de Conxo y del Camino Francés todavía no están concluidos, pero lo estarán para licitarlos a finales de año. Es el plazo que maneja la conselleira, que ayer anunció también que este verano se abrirá el concurso para afrontar la intervención en el Camino Inglés, entre el Polígono del Tambre y Boisaca. Con el proyecto constructivo de este ultimándose ya, la Xunta está preparando el convenio que fija sus obligaciones y las del Ayuntamiento, que colabora con el plan autonómico. El segundo tramo de la ruta francesa, desde San Lázaro a Concheiros, todavía carece de proyecto. El objetivo es que todos estén en el 2021.