La USC convalidará cada año a 50 aspirantes al título de Criminoloxía

Susana Luaña Louzao
susana luaña SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

CENAMOR

Otras 50 plazas anuales serán para los alumnos que inicien el nuevo grado oficial

06 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La Universidade de Santiago estrenará el próximo curso tres grados, tal y como se aprobó en el nuevo mapa de titulaciones del sistema universitario de Galicia. Serán los de Criminoloxía, Paisaxe y Biotecnoloxía. Los tres muy demandados, sobre todo el primero, porque la USC lleva décadas impartiendo esa disciplina como titulación propia. Tan elevada demanda indica dos cosas; que hay necesidad de esa especialidad en el mercado de trabajo y que los cientos de alumnos que lo cursaron con anterioridad están a la espera de que se implante la titulación oficial para la convalidación de unos estudios que, a nivel oficial, no están reconocidos.

La USC tiene ya elaborada la memoria, que cuenta con el visto bueno tanto del Ministerio de Educación como de la Axencia para a Calidade do Sistema Universitario de Galicia (ACSUG). Para su implantación, únicamente falta la autorización por parte de la Xunta, que no debería retrasarse más de unas semanas. Si todo sale como está previsto, será a partir de ese momento cuando se active el proceso de matriculación para el primer año de impartición del grado. A diferencia de los otros dos que se van a implantar, que son de nueva creación y que por lo tanto solo tendrán alumnos nuevos matriculados en primer curso, en el caso de Criminoloxía la especialidad importa tanto a los nuevos alumnos como a los que están a la espera de convalidar el título propio que tienen de la USC. Por eso la intención de la Universidade es que cada año se publique una oferta de cien plazas en la que la mitad sería para los alumnos nuevos y la otra mitad, para los que quieran convalidar sus estudios.

No todos los que tengan en su haber el título propio de Criminoloxía podrán convalidarlo. La USC exigirá para ello la realización de un curso puente que más o menos se correspondería con un año académico. No es exacto porque lo que se convalidan son los créditos, no el curso, pero a los interesados puede serles de interés saber que el título propio constaba de 184 créditos mientras que la media de los grados en la USC es de 240. Lo que no se sabe todavía es si los alumnos dispondrán de facilidades para cursarlo, por ejemplo, con clases on line o semipresenciales. Buena parte de los interesados están trabajando, y en el caso de los cuerpos de seguridad, necesitan de esa titulación para la promoción interna, en la que, para ascender a ciertos puestos de rango superior, se les exige un título universitario.

La lista de espera supera el millar de aspirantes y solo habrá 50 plazas cada año para el curso de adaptación, que se cubrirán teniendo en cuenta el expediente. Es a todas luces insuficiente para quienes esperan desde hace años la convalidación. Además, solo podrán acceder al curso los que lograron el título en los últimos años, ya que en sus inicios la programación que se daba era corta y no da pie a la convalidación de un grado por mucho que se establezca para ello un curso puente.

Si bien los detalles para la convalidación del título se darán a conocer cuando se publique la memoria, será difícil que desde la USC se barajen soluciones como las que piden algunos afectados, que abogan por la realización de trabajos que les permitan convalidar el título. Y más en los tiempos que corren, en los que a raíz del caso Cifuentes, las universidades públicas quieren poner en valor sus mecanismos de control para garantizar la fiabilidad de sus acreditaciones.

La USC exigirá un curso puente que más o menos se correspondería con un año académico

«Están jugando con la ilusión, con el dinero y con las expectativas de la gente»

La Universidade se rige por unas normas estrictas que no entienden de excepciones, pero a los afectados no les vale. Hay cientos de alumnos que esperan desde hace tiempo por la convalidación del título y que aseguran que todos los años se les prometía que se iba a implantar y que podrían convalidarlo. Ahora, llegado el momento, no ven satisfecha su demanda, y se sienten estafados. «Están jugando con la ilusión, con el dinero y con las expectativas de la gente», asegura un alumno que, como tantos, no sabe cuántos años tardaría en poder convalidar el título ni tiene tampoco disponibilidad para hacer el curso puente de forma presencial.

Quienes ejercen más presión son los miembros de las fuerzas del orden que necesitan de una titulación universitaria para ascender en la escala de mando y que precisan para ello de un título universitario. Guardan en su cajón su certificado de Criminoloxía, pero sospechan que de nada les va a servir.