El vino le gana la batalla del mal tiempo en Vedra

Emma Araújo SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

Xoán A. Soler

La feria de exaltación de la subzona del Ulla premia los mejores caldos de la última vendimia y mantiene la tradición de las botas gigantes de vino

08 abr 2018 . Actualizado a las 20:13 h.

La Exaltación do viño da Ulla ha cumplido veintiocho primaveras fusionando la tradición de las botas gigantes de degustación gratuita y el disfrute reposado de los caldos amparados por la Denominación de Origen Rías Baixas de la subzona del Ulla. Los vecinos de San Miguel de Sarandón, que cada año se reparten la tarea de organizar la fiesta, optaron por ser precavidos e instalar una amplia carpa en el Campo da Feira para que si la lluvia hacía acto de presencia no hubiese impedimento alguno para disfrutar de la jornada. Durante toda la mañana el vino le ganó por goleada la guerra al agua. La primera prueba de ello fue que la zona de aparcamiento cercana al recinto se fue ocupando progresivamente, aunque de forma más pausada que en las calurosas ediciones de años anteriores.

El buen ambiente presidió los actos formales de lectura del pregón, a cargo de Blas, conocido por ser la voz de la orquesta París de Noia, toda un veterano en lo que a actuaciones se refiere en Sarandón. Este año, por vez primera, un grupo de catadores seleccionó los mejores vinos del año y sus respectivos propietarios recibieron la merecida mención, que se vio acompañada de los diplomas entregados a las diez bodegas de la subzona que mostraron y comercializaron sus caldos en el recinto de la fiesta.