Santiago se alista a la moda del escapismo

Patricia Calveiro Iglesias
P. Calveiro SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

CEDIDA

En los dos últimos años abrieron tres empresas en la ciudad y los fines de semana llega a haber lista de espera

28 mar 2018 . Actualizado a las 10:41 h.

Una sala temática cerrada a cal y canto. Una misión que resolver y 60 minutos para resolver los acertijos y pruebas para superarla y conseguir abrir la puerta. Esta es la filosofía de las salas de escapismo, una nueva oferta de ocio que llegó a Santiago hace dos años y que cada vez tiene más tirón. En la capital gallega ya hay tres empresas que se dedican a esta actividad. Seis retos distintos y, en breve, planean poner en marcha alguno más para atender a la demanda. Es tal que los fines de semana, especialmente los sábados, llega a haber lista de espera para vivir este tipo de experiencia. En grupo, eso sí, para comprobar quién tira del carro en cada pandilla y hace alarde de ingenio y quién se bloquea ante las adversidades.

The Paradox Room, en Área Central, abrió la veda. Adrián Caeiro, un mago compostelano, y Enrique Latorre, sadense licenciado en Filosofía que trabajaba en la hostelería, dieron el paso. «Veníamos de trabajos precarios, ambos éramos fanáticos de los juegos de aventuras gráficas y se nos ocurrió abrir aquí una Escape Room, algo que ya funcionaba en otras ciudades», cuenta el santiagués. ¿El perfil de sus clientes? «Es muy variado, va desde los 25 a los 50 años. Hay muchas despedidas de solteros y viene bastante gente de fuera de Galicia, de Barcelona, Madrid y Asturias sobre todo, donde este juego está muy de moda», indica.

Terroristas o héroes

Tienen dos salas. «Cuentan la primera parte de una película. Unos son los terroristas que intentan piratear a la corporación y los otros la otra parte, la corporación, que trata de salvar a la humanidad», explica Caeiro. Si no completan el desafío en una hora, en el primer caso el laboratorio explota y en el segundo, son capturados por la Policía. «La gente no repite en la misma sala, no tendría sentido, porque ya saben cómo pasar los retos, pero si prueban una generalmente vuelven a las dos o tres semanas para probar en la otra», añade. Tan bien está funcionando que planean abrir una tercera sala, que sería el desenlace de la historia.

En estos dos años que va a cumplir en mayo The Paradox Room han tenido anécdotas para todos los gustos. «Hemos visto de todo. Hasta cómo arrancaban el pomo de una puerta que no se abría pensando que esa era la forma de salir. Bajo presión todo el mundo reacciona de forma curiosa. Te sorprenderías», reconoce Caeiro. «Tenemos un botón del pánico, y da mucha seguridad, pero nunca se ha llegado a utilizar hasta ahora. Han jugado personas claustrofóbicas y se olvidan de que están encerrados. Solo se llegó a pulsar por motivos ajenos al juego. Por fuerza mayor, como puede ser una diarrea», reconoce.

También para niños

A finales del 2016 abrió sus puertas Eskapark Compostela, la única franquicia de la ciudad. Su encargado, Eduardo Coto, explica que tuvo su primer contacto con una Escape Room en Vigo. En el negocio de la avenida Rosalía de Castro hay tres salas. La de Alcatraz, que recrea la clásica cárcel de máxima seguridad; la Mazmorra medieval; y este mes estrenó una nueva, la Caja diabólica. «La gente que juega al primero quiere más», confirma. Y, como en el caso anterior, hace falta reservar con dos o tres semanas de antelación para poder jugar un sábado.

«Lo que nos diferencia de las demás salas de Santiago es que pueden jugar los niños sin estar acompañados por sus padres. Desde los 10 a los 13 años, con un monitor, y a partir de los 14 pueden hacerlo solos. Hay una sala de cumpleaños con merienda y funciona muy bien», indica el estradense. Sin embargo, los universitarios son su público más habitual, aunque casi todas las semana tienen algún grupo que está de despedida de soltero. Y, como en el caso anterior, también reciben a peregrinos que llaman para reservar con antelación. Con todo, en Eskapark «lo habitual es gente de Santiago o alrededores. El público gallego supone, más o menos, el 80 % del total, y el 20 % son de otras partes de España o extranjeros», apunta Coto.

El responsable de esta franquicia también está curado de espanto. «¿Anécdotas? Todos los días hay alguna», subraya.

«Bajo presión todo el mundo reacciona de forma curiosa. Te sorprenderías»

«¿Anécdotas? Todos los días hay alguna en una Escape Room»