Emociones para prevenir desgracias

Xurxo Melchor
xurxo melchor SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

PACO RODRÍGUEZ

La nueva campaña de seguridad vial de la Policía Local busca remover por dentro a los jóvenes y lograr que ni beban alcohol ni usen el móvil cuando estén al volante

19 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

«Impactante». Así, en palabras de una alumna de primero de bachillerato de artes del instituto de Sar, es el vídeo sobre el que gira la nueva campaña de seguridad vial del Concello de Santiago, «Ti decides, ti controlas». El equipo de atestados de la Policía Local la está llevando por todos los institutos de la ciudad porque estos jóvenes de entre 16 y 17 años serán conductores muy pronto y deben saber de primera mano a lo que se exponen. Con esa misión acudieron ayer a Sar los agentes Carlos y Logi y la oficial que coordina el departamento, Diana Parente, una experta convencida del poder que las emociones tienen en la conducta del ser humano. «O vídeo chégalles, algúns incluso preguntan se é unha recreación porque as imaxes son duras», explica.

Las imágenes son una historia ideada por la propia Parente que reproducen una situación que puede darse cualquier fin de semana. Unos jóvenes están de fiesta, al terminar la noche deciden volver a casa en coche pese a que todos han bebido alcohol y la noche acaba con el coche volcado y una chica muerta. Es la novia del conductor. Otro vídeo de la Dirección General de Tráfico (DGT) complementan la advertencia. En él, dos discotecas de Madrid y Barcelona proyectan otro mensaje tan dramático como real. Un joven explica como lleva más de tres años en prisión por conducir bebido y provocar un accidente en el que murió su mejor amigo y a otro casi le tuvieron que amputar una pierna. A la carga de conciencia y la prisión se suma otro peso que ha destrozado su vida: deberá pagar indemnizaciones a las víctimas durante muchos años.

El momento suscita interés. Los chicos no saben que un conductor bebido o bajo los efectos de las drogas, además de incumplir la ley, no está cubierto por su seguro, por lo que debe hacer frente con su patrimonio a todos los daños que cause. Todos toman nota, misión cumplida.

Junto al consumo de alcohol y drogas, el otro gran peligro al que se exponen los conductores, y en especial los jóvenes, es a la distracciones. De buena parte de ellas tiene la culpa el móvil, pero comer al volante o cambiar la emisora de la radio pueden ser también fatales. El agente Logi les pone un ejemplo. El pasado 30 de diciembre tuvo que atender el atropello de dos jóvenes en un paso de cebra de As Cancelas. Los chicos dieron por hecho que el coche pararía, pero la conductora iba comiendo chucherías y los dos segundos que tardó en bajar la vista a la bolsa y volver a subirla fueron suficientes para provocar el accidente.

En este punto los agentes hacen un énfasis especial, porque la gran mayoría de los muchos atropellos que últimamente se registran en Santiago tiene como causa una distracción del conductor, del peatón o de los dos porque iban usando el móvil. La jornada es un éxito. «Estas campañas son moi necesarias. Aos alumnos si que quédalles a mensaxe, na que logo pensan e recapacitan», explica Carmela, una de sus profesoras. Ahora que tienen la información, como dice el eslogan de la campaña, ellos deciden.