Una víctima de los robos en Conxo: «Al llegar a casa aún estaban dentro»

Conxo ha vivido en los últimos días una oleada de robos en viviendas y garajes que tiene muy preocupados a los vecinos de este barrio compostelano. Especialmente, a los de zonas como Volta do Castro o la avenida de Ferrol, en las que se han cebado los ladrones, que todo apunta a que se trata de un grupo organizado porque actúa siempre con el mismo modus operandi y en períodos cercanos de tiempo.

La Policía Nacional está investigando varias denuncias, pero entre los vecinos conocen al menos tres casos que se registraron el domingo de la semana pasada y en días anteriores. En uno de ellos, que tuvo lugar en Volta do Castro, las víctimas se llevaron un susto de muerte cuando se percataron de que los ladrones estaban aún dentro del piso cuando ellos entraron en él. Afortunadamente, no se cruzaron «porque yo creo que nos estaban vigilando o que alguien les avisó y se marcharon al vernos llegar», explica el propietario de la vivienda asaltada.

Era domingo y la familia había salido. Cuando volvieron, la mujer se fijó en que la luz estaba encendida en la vivienda, muy visible desde la calle porque está situada en el bajo del edificio. «Ella se pensó que se había olvidado de apagar la luz, pero cuando entramos en el piso todo estaba apagado. Fue entonces cuando ya vimos que estaba todo revuelto en el dormitorio y nos dimos cuenta de lo que había pasado y de que al llegar nosotros a casa ellos aún estaban dentro», explican.

En comparación con el susto, lo robado fue más bien poco. No debió darles tiempo a más, porque tan solo alcanzaron a llevarse una pequeña cantidad de dinero y algunas joyas. Ese es, precisamente, el botín que busca este grupo de ladrones que tiene en vilo al barrio de Conxo. El mismo que se llevaron en los al menos dos pisos de la avenida de Ferrol en los que también entraron.

Estas no han sido las únicas visitas recientes de los cacos a esta zona de Santiago. Recientemente, también se dejaron caer por algunos garajes y perpetraron robos en el interior de los vehículos. Uno de los afectados fue, precisamente, el del matrimonio que estuvo a punto de encontrarse frente a frente con los ladrones.

Sin rejas en las ventanas

Otro de los aspectos comunes de todos estos robos es que se han producido en viviendas situadas en bajos de los edificios y que carecen de rejas en las ventanas. Esta falta de seguridad fue la que aprovecharon los ladrones para acceder a los pisos. En el caso de la familia de Volta do Castro, se lamentan de que llevan años advirtiendo de esta circunstancia a la comunidad de propietarios y de que hasta ahora les han negado permiso para instalar rejas por cuestiones estéticas. «Después de lo que ha sucedido, parece que ahora sí nos van a dejar y que el tema se va a hablar en la próxima reunión», señalan.

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