El 21-D lastra el refuerzo policial en Navidad

Xurxo Melchor
xurxo melchor SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

PACO RODRÍGUEZ

Las elecciones catalanas impedirán la presencia del dispositivo especial contra el terrorismo islamista

17 dic 2017 . Actualizado a las 01:44 h.

La crisis que atraviesa Cataluña por el proceso secesionista tiene efectos colaterales que se expanden por todo el país y llegan también a las calles de Santiago. Las elecciones convocadas para el 21-D obligarán a mantener un dispositivo policial extraordinario en las cuatro provincias catalanas que estará formado por agentes de todo el resto de España, también de Galicia, lo que cuando menos lastrará el refuerzo que tiene que desplegarse en Compostela durante la Navidad, unas fechas clave tanto en la comisión de robos y hurtos como también, por su especial significación, en la posibilidad de atentados terroristas por parte del islamismo radical.

Santiago carece de su propia Unidad de Intervención Policial (UIP) y depende de la disponibilidad de A Coruña y Vigo para poder contar con estos agentes especializados en momentos clave del año, como la Navidad o el verano, en los que hay más riesgo de atentados del terrorismo islamista. Los grupos coruñeses y vigueses estarán en Cataluña, por lo que no podrán desplegarse en Compostela hasta, como muy pronto, después de las elecciones, entre los días 22 o 23. En el Sindicato Unificado de Policía (SUP) son más pesimistas y se temen que la UIP no llegará a estar presente en la ciudad y que, a lo sumo, lo hará el día 30, por la traslación del Apóstol.

El refuerzo tendrá por tanto que centrarse en la operación Comercio Seguro que pondrá en marcha la Jefatura Superior de Policía de Galicia en toda la comunidad durante las fiestas navideñas. Para Santiago se han aprobado veinte servicios extraordinarios para este mes y otros tantos para el de enero. Se trata de horas extra que hacen agentes a los que les correspondería librar para reforzar la presencia policial en las calles. El SUP, que es la organización sindical mayoritaria en el cuerpo en Galicia y en toda España, estima que estos cuarenta servicios a mayores son «insuficientes» y que deberían triplicarse hasta los 120, sesenta cada mes.

Las previsiones oficiales también cuentan con recibir apoyos de agentes de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) llegados desde A Coruña y Vigo para reforzar el dispositivo en Santiago. El SUP advierte que, al menos por el momento, no se han planificado esos apoyos y que tendrá que ser por tanto la UPR compostelana la que asuma todo el trabajo. Nuevamente, estos problemas operativos dejan patente la necesidad de contar con una UIP propia y la de cubrir las sesenta vacantes con que cuenta la plantilla de la comisaría local.

El operativo integrará a la Policía Local y a la seguridad privada

 

 

El dispositivo especial que desplegará la Policía Nacional en Santiago y en el resto de ciudades de Galicia durante las fiestas de Navidad integrará tanto a la unidad autonómica como a la Policía Local, así como incluso a la seguridad privada, que en Compostela es especialmente relevante en el caso de la Catedral.

Recientemente, los agentes municipales han comenzado a recibir formación antiterrorista en la Academia Galega de Seguridade, pero en Santiago este plan choca nuevamente con la alarmante falta de efectivos que padece la ciudad. Si en la comisaría son sesenta los agentes de menos con que cuenta la plantilla, en la Policía Local son cuarenta las bajas que no se han cubierto, lo que está condicionando la capacidad operativa del cuerpo municipal, que solo se mantiene gracias al máximo esfuerzo que están haciendo los funcionarios.

En fechas de grandes aglomeraciones en las calles como es la Navidad los delitos que más hay que vigilar son los robos y hurtos. Carteristas, timadores y descuideros intentan sacar provecho de la falta de atención de sus víctimas. La recomendación es no llevar todo el dinero en una misma cartera o bolso y no hacer caso de personas que nos ofrecen negocios en plena calle, como los famosos trileros o timos con supuestos billetes de lotería premiados.