Los pisos en el entorno de la plaza Roxa son los más caros, pero también los preferidos por los estudiantes compostelanos
30 oct 2017 . Actualizado a las 13:43 h.Un estudio que publicó hace dos meses Uniplaces constataba que Santiago es una de las ciudades más baratas y con mejor nivel de vida para los estudiantes, y lo aseguraba en base a varios parámetros que incluían el precio del alquiler de las habitaciones, con una media de 407 euros en Barcelona que en Compostela bajaba hasta los 180 euros. Pero incluso dentro de la propia ciudad, el coste de vida es muy diferente para quien estudia, por ejemplo, Económicas o Filoloxía, y el que se matricula en Derecho o Matemáticas. Teniendo en cuenta que los universitarios suelen preferir vivir muy cerca de su facultad, los del campus norte van a encontrar pisos mucho más baratos que los del campus sur, atendiendo a la oferta inmobiliaria de cada zona.
Por supuesto que el precio de una habitación de estudiante en Santiago depende mucho de la calidad del piso elegido, no solo de la zona. Pero teniendo en cuenta ofertas similares -es decir, habitaciones luminosas en pisos con calefacción y cocina equipada- la diferencia entre un campus y el otro puede ser de más de 100 euros. En San Caetano los hay por 150 euros, el mismo precio que en Campiño Guadalupe. Ya si lo que se busca es un piso muy económico sin tener en cuenta la calidad, en la calle Rianxo hay habitaciones por 100 euros, y en Home Santo, por 130. Todos ellos cerca de las facultades del campus norte.
En cambio, en la plaza Roxa los precios oscilan entre los 190 euros y los 250, y en la plaza de Vigo llegan a los 300 euros, importe que también es habitual en Frei Rosendo Salvado. Hay zonas cercanas al campus sur que también han sacado provecho de su ubicación y que tienen una interesante oferta inmobiliaria con habitaciones algo más económicas que en el Ensanche pero en pisos nuevos y de calidad. Es lo que ocurre en Conxo, donde incluso hay apartamentos amplios y bien equipados con luminosas terrazas donde las habitaciones cuestan 200 euros, o en el Castiñeiriño, con ofertas similares.
Si el estudiante quiere gastar, tendrá dónde, porque en la plaza de Vigo hay ofertas de pensión completa por 575 euros, y en la zona de San Roque, habitaciones que alcanzan los 500 euros mensuales pero con baño propio y en pisos que tienen plaza de garaje, calefacción de suelo radiante, terraza y hasta servicio de limpieza. Un lujo al que no pueden aspirar la mayoría de los matriculados en la USC.
Cerca del campus
Con todo, estudiar en Santiago es mucho más barato que en las universidades de las ciudades más pobladas de España. Si la diferencia de precio por habitación en Compostela ronda los 100 euros dependiendo de la zona, en Madrid pueden superar los 200. Un dormitorio en un radio de dos kilómetros del campus estudiantil de Moncloa, en la Universidad Complutense, cuesta de media 662 euros al mes, mientras que el precio en el centro de la ciudad es de 414. El incremento puede llegar al 54 %.
«Quise ir al centro pero no encontré nada como en el campus norte»
Noelia Castro es de Lalín y lleva ya cuatro años en Santiago viviendo en el mismo piso, cerca de la facultad donde cursa Filoloxía Inglesa, en el campus norte. Está en un piso luminoso y con todas las comodidades por el que paga 130 euros. «Somos tres en el piso y todos pagamos lo mismo». Aunque le queda al lado de la facultad, no fue por eso por lo que lo eligió. «De hecho me gustaría vivir en el centro y este año estuve mirando para mudarme, pero después de ver unos cuantos ya me di cuenta de que en calidad-precio no había comparación, así que sigo igual, quise ir al centro pero no encontré nada como en el campus sur». Asegura que la diferencia entra una zona y otra supera los cien euros.
«Estoy en una residencia de Rosalía de Castro y pago 550 euros al mes»
Zaida Hernández es de Madrid y esperaba plaza en cualquier facultad de Medicina de España. A última hora se la dieron en Santiago, así que en cinco días tuvo que organizarlo todo y hacer las maletas. «Por eso elegí una residencia de estudiantes cerca del campus, porque no conocía Santiago y era lo más seguro. Es en Rosalía de Castro y pago 550 euros al mes». Está contenta, pero reconoce que es muy caro. «No tengo que preocuparme de nada más que de estudiar, pero es mucho dinero». De hecho, su intención es cambiarse. «En cuanto conozca a gente de la facultad, lo que quiero es buscar un piso con algún compañero», dice desde la biblioteca Concepción Arenal, donde ya está estudiando pese a ser inicio de curso.