Afectados de daño cerebral piden una estrategia que les ayude a tener una vida digna

Joel gómez SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

Zelia Zambrano

Insisten en que las secuelas que sufren, y que les provocan dependencia, resultan «invisibles» para la mayoría de la sociedad

27 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El colectivo de personas afectadas de daño cerebral adquirido reclaman una estrategia estatal que les ayude a tener una vida digna tras recibir el alta en el hospital. En este mensaje han insistido ayer, en la conmemoración del día dedicado a este problema de salud, declarado por el Consejo de Ministros en agosto del 2007. El 29 de octubre se conmemora el día mundial del ictus, considerado como la principal causa del daño cerebral adquirido.

La asociación Sarela, que agrupa en Santiago a personas afectadas y familiares, y ofrece un centro para la rehabilitación y otros servicios, conmemoró ayer la efeméride con mesas informativas y con una caminata que partió de la Alameda y finalizó a mediodía en el Obradoiro. En esta plaza se leyó un manifiesto. La convocatoria la apoyaron decenas de personas, entre ellas representantes de todos los grupos municipales, pues se sumaron Concha Fernández, Agustín Hernández, María Corral, Paco Reyes, Rubén Cela, Gonzalo Muiños y Alejandro Sánchez Brunete.

El empresario José Balboa, presidente de Sarela, presentó la lectura del manifiesto, que realizaron tres personas afectadas de daño cerebral adquirido y dos familiares. El documento insiste en que las secuelas que sufren, como consecuencia de un ictus, un accidente, un golpe en la cabeza, un tumor cerebral, una anoxia o otras situaciones, les producen secuelas que son causa de dependencia, y que resultan «invisibles» para la mayoría de la sociedad. La invisibilidad se acentúa cuando les dan de alta en el hospital. Citan entre esas secuelas problemas de memoria o comunicación, alteraciones de conducta y emocionales, estados prolongados de coma, y otras, que no se perciben a primera vista y resultan difíciles de entender, sostienen.

Por eso reivindican que se ponga en marcha un proceso, cuando reciben el alta hospitalaria, que atienda a esas necesidades, y que también preste asistencia a sus familiares. Es necesario adoptar medidas «de forma coordinada entre todas as Administracións implicadas na atención ao colectivo», enfatizan.

En España viven 420.000 personas con daño cerebral adquirido, unas 35.000 en Galicia; y cada año en el Estado se dan 104.000 casos nuevos, de ellos casi 7.000 en la comunidad gallega, destacan para resaltar la dimensión de este problema. Consideran que la continuidad asistencial tras salvar la vida de estas personas en el hospital es imprescindible, para que cada vida salvada sea vivida con dignidad, con los recursos necesarios para garantizar su calidad de vida e inclusión social.

Las asociaciones gallegas premian la «valentía» de María Escario

Sarela de Santiago, y las restantes asociaciones que integran la Federación Galega de Dano Cerebral (Fegadace) premian hoy a la periodista María Escario. Lo hacen por su «valentía á hora de afrontar publicamente o ictus», enfermedad que causa el 78 % de los casos de daños cerebral adquirido, y que ella sufrió en el año 2012. La Sociedad Española de Neurología afirma que en España sufren un ictus entre 110.000 y 120.000 personas cada año, de quienes «un 50 % quedan con secuelas discapacitantes o fallecen», afirma.

Además, Fegadace resalta de María Escario su «particular fortaleza» ante el daño cerebral adquirido, y «a naturalidade no retorno ao traballo e á normalidade despois da doenza».

El galardón lleva el nombre de Miguel Blanco, como homenaje a este neurólogo, fallecido en el 2015, que dirigía la unidad del ictus del complejo hospitalario compostelano.

En el acto, las asociaciones gallegas de daño cerebral estarán apoyadas por representantes de la Xunta, Concello de Santiago, Instituto de Medicina Legal de Galicia, Dirección General de Tráfico y del Centro de Referencia Estatal de Atención al Daño Cerebral.