El alcalde acata la exigencia del BNG y ordena no comprar porras a la policía

Xurxo Melchor
xurxo melchor SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

PACO RODRÍGUEZ

Asegura que el encargo fue un descuido durante las vacaciones del edil Xan Duro

30 sep 2017 . Actualizado a las 21:06 h.

El Concello de Santiago no comprará porras para la Policía Local. No comprará las nuevas que ya tenía encargadas, porque estos elementos han formado siempre parte del equipamiento del cuerpo de seguridad municipal. El alcalde, Martiño Noriega (Compostela Aberta), ha dado orden de dar marcha atrás al contrato ya firmado, acatando así de inmediato la exigencia que le hizo el Bloque Nacionalista Galego, que considera incumplido el acuerdo plenario del pasado 20 de julio por el que la corporación, con los únicos votos a favor de CA y BNG, decidió posicionarse en contra del uso en la ciudad de material antidisturbios.

«Hoxe -por ayer-, que tiven constancia, chamei a Contratación. O proceso de licitación non está iniciado e pedín que se rectifique ese punto concreto», explicó el regidor. Eso sí, Noriega reprochó que el BNG no hubiese optado por anunciarle a él personalmente que había detectado el supuesto incumplimiento del acuerdo plenario y que hubiese hecho uso de los medios de comunicación para trasladarle sus exigencias. «O tería feito -revocar la compra de porras- sen necesidade de entrar en determinados debates que parece que buscan máis o titular que a finalidade da cuestión», se lamentó.

Para el alcalde, este asunto se trata de un descuido que el gobierno local no percibió porque el concejal con competencias en la Policía Local, Xan Duro, estaba de vacaciones, lo que hizo, explica Martiño Noriega, «que o expediente o firmara Rafa Peña e non creo que el, sindicalista connotado e combativo, sexa sospeitoso dese tipo de cuestións», señaló.

El acuerdo contra el uso de material antidisturbios en Santiago, que rechazó el PP y ante el que se abstuvo el PSOE, se tomó justo después de los violentos disturbios provocados por grupos de apoyo a los okupas desalojados de una casa en la Algalia de Arriba. Compostela Aberta y el Bloque censuraron la actuación de la Policía Nacional, pese a que fue comedida y a que incluso seis de sus agentes resultaron heridos graves. Ese apoyo a los okupas ha hecho que el sindicato policial SUP no vaya a acudir el lunes al patrón del cuerpo para no compartir el acto con estas dos formaciones políticas.

Malestar entre los agentes, que advierten que solo es material de seguridad personal

La decisión de Noriega de revocar la orden de compra de 21 porras extensibles con funda y otras once semirrígidas con tahalí sin duda satisfará al BNG, pero amenaza con enfrentar al regidor con un importante e influyente grupo entre los funcionarios y trabajadores del Concello: los policías locales.

Fuentes sindicales del cuerpo de seguridad municipal explicaron ayer que las porras no son material antidisturbios y que han sido utilizadas desde hace años por los agentes. Son elementos de protección para el policía, que las usa en su defensa y tan solo para reducir a delincuentes que se resisten. Además, forman parte del equipamiento que estipula y permite la Ley de Coordinación de las Policías Locales de Galicia y todo agente que desee portarlas debe de contar con un curso en el cual se le instruye sobre su uso correcto.

Entre los agentes de la Policía Local no ha caído bien la decisión del alcalde. Muy al contrario, son muchos los que han recibido la noticia de que se da marcha atrás en la compra de este material tan necesario con sorpresa y un profundo malestar. En el cuerpo cunde la opinión de que la actitud del regidor es fruto del desconocimiento y descoordinación del gobierno local de Compostela Aberta. «Non falan entre eles e non nos preguntan a nós, que somos os que lles podemos explicar a realidade», señala un agente. En el cuerpo esperan que una vez que Noriega cuente con toda la información rectifique y autorice la compra de las necesarias porras.