Doscientos alfombristas crearon diferentes composiciones con forma de vieira en el Obradoiro
04 sep 2017 . Actualizado a las 21:27 h.Una enorme concha con otras dieciocho en su interior. En eso se convirtió ayer durante toda la mañana la plaza del Obradoiro. En un llamamiento a la paz. Un llamamiento floral. Pequeñas obras de arte realizadas durante la noche por las manos expertas de doscientas personas que, en un trabajo casi de orfebrería, han creado casi una veintena de alfombras florales que ayer congregaron a decenas de curiosos en el Obradoiro. «Hai tres continentes», señalaba la directora xeral de Turismo, Nava Castro, poco antes de que el arzobispo de Santiago, Julián Barrio, se acercase para admirar el trabajo de los alfombristas. A los pies de la Catedral se podía observar el trabajo de personas llegadas de Japón, de México, de Italia y de Alemania, pero también de Cataluña, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Canarias y, por supuesto, Galicia. Las alfombras florales de Ponteareas están declaradas como fiesta de interés turístico internacional. También había alfombras de Bueu, Burela, Cangas, Redondela, Rianxo y Ribadavia. «La calidad de estas alfombras que veis hoy, en el próximo evento se habrá extremado», explicaba Vicenta Pallarés, de la comisión internacional de entidades alfombristas, una institución que en los últimos seis años ha organizado tres congresos y que vela por que esta arte efímera esté cada vez más presente y con mayor belleza.