«Temos unha imaxe moi limitada do que era a muller na época medieval»
SANTIAGO CIUDAD
El investigador estudia la figura de Margery Kempe, peregrina jacobea en 1417
27 sep 2017 . Actualizado a las 12:25 h.Margery Kempe, una mística religiosa inglesa de la época medieval, llegó en 1417 a Santiago a través del Camino Inglés y fue la única mujer peregrina del medievo de la que se tiene constancia documentada a través de un relato autobiográfico. Su figura ha sido estudiada por el historiador ourensano Miguel García Fernández (1988), que descubrió el libro de Kempe gracias a su tesis doctoral sobre la historia de las mujeres y las relaciones de género en la Galicia medieval. García llevó ayer al Hostal dos Reis Católicos el relato de la inglesa, en una conferencia enmarcada en el ciclo ¿A dónde vas, peregrino? .
«É unha muller que representa moitas cousas, entre elas as marxes de liberdade feminina que había na época», destaca Miguel García, que considera fundamental la obra de Margery Kempe para acabar con los tópicos que hay en torno a la mujer medieval. «Rompe coa idea de que elas so estaban casa ou que a peregrinaxe era algo ligado aos homes», explica el historiador, que sostiene que hoy en día la educación todavía sigue perpetuando en cierta medida este mismo estereotipo.
García es reticente, sin embargo, a hablar de empoderamiento durante esta etapa histórica. «É matizable. Ás veces esaxeramos. Nin un extremo nin outro. A posición das mulleres na idade media é sobre todo de negociación perpetua, entre o que ela quere facer e o que a sociedade lle vai permitindo», señala.
Pese que el libro de Kempe es considerado la primera autobiografía en habla inglesa, según cuenta García, la figura de la autora y su obra no tienen gran reconocimiento más allá del ámbito de la investigación, que empieza ahora a valorarla. «Obras como esta axudarían a reconfigurar o imaxinario social sobre o pasado», defiende García, que considera fundamental estudiar esta historia en la universidad y en la enseñanza en general. «Temos unha imaxe moi limitada do que era a muller na época medieval. Este é un caso documentado, pero non habería outras mulleres peregrinas na época? Todo apunta a que si», remata el investigador.
Sobre el Camino y Santiago, la peregrina Kempe dejó pocos detalles, aunque sí se sabe que se sintió muy a gusto en la ciudad. También consta en su relato que salió desde Bristol y llegó a un puerto gallego. El historiador señala que probablemente fuera el de A Coruña. Deja constancia, por lo tanto, no solo del recorrido a pie desde este lugar costero hasta Compostela, sino también de la ruta marítima que se hacía antes por el Camino Inglés. Roma y en general Inglaterra fueron otros de los lugares por los que viajó esta peregrina, que fue muy criticada e incluso foco de insultos por parte de aquellos a los que no le gustaba su actitud. «Era unha muller un tanto alborotadora que facía que moita xente se afastase dela. Por exemplo, nun momento decidiu vestir só de branco, de pureza, pese que tiña xa catorce fillos e estaba casada», relata el historiador ourensano , cuya pasión por el medievo viene de hace tiempo.
Las vivencias personales de Miguel García hicieron que quisiera acercarse más a la historia de las mujeres en Galicia y, en concreto, a las de la época medieval, en las que centra su tesis doctoral. «Na miña casa a importancia que tivo a miña nai ou a miña avoa foi fundamental. Tanto eu como a miña irmá recibimos unha educación na que non houbo diferenciación de xénero. E tampouco é que sexamos unha familia moi alternativa» revela el historiador, al que siempre le llamaron la atención los prejuicios en torno al hombre y la mujer. Para romperlos, afirma, es fundamental hacerse preguntas y revisar el pasado. Se trata, concluye, de «replantearnos moitas cousas que poden axudar ao presente. Se as mulleres tiveron outro papel no pasado, non deberían ter un mellor no presente?».
O protagonista. Miguel García Fernández se licenció en Historia por la USC y es especialista en las relaciones de género en la Galicia Medieval.
O proxecto. La tesis doctoral de García trata la figura de Margery kempe, la única mujer peregrina del medievo de la que se tiene constancia a través de un relato autobiográfico.