Afrontan con optimismo la recta final tras la buena respuesta del público del fin de semana
07 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Dos jóvenes hablan en inglés mientras ojean un libro en gallego. Un poco más adelante, una adolescente busca un poemario y, a escasos metros, niños que no llegan ni a los diez años juegan con piezas de construcción. Todos comparten espacio: la Praza da Quintana, que desde el pasado viernes hasta el domingo 11 acoge la primera edición de la Semana do Libro de Compostela.
La oferta de los más de treinta expositores -hay editoras y librerías- es muy diversa. Desde los libros más vendidos hasta obras más específicas sobre arte, música o tratados constitucionales. Los precios también lo son. No se puede decir que no haya ejemplares para todos los bolsillos. Por 2,5 euros se pueden adquirir unas pequeñas obras de literatura brasileña y por cinco euros la oferta ya comienza a ser más amplia. A su lado conviven obras que pueden alcanzar 40 euros. También hay quien se queda con las ganas de llevarse un libro porque no está a la venta por el momento al ser una publicación institucional.
La iniciativa buscó un formato diferente con su disposición a la de la feria del libro tradicional y, ahora que llega el ecuador, el balance es positivo. En los mejores días no hubo sorpresa: el fin de semana. El peor, el lunes, por la lluvia. «Está funcionando ben», dice sin dudar Carlos Meixide. Su puesto ha captado el interés de los turistas con unos mapas de la ciudad que muchos aprovechan para llevarse de recuerdo. Coincide en la apreciación Roberto Sanmiguel, de Alita Cómics, que añade que la cita también les permite «saír á rúa e facernos ver, que é importante». En su puesto, por ejemplo, apostaron por los cómics en gallego. Los que más salida están teniendo: los de superhéroes dirigidos al público infantil.
David Cortizo, de Urco Editora y uno de los representantes de la Mesa do Libro -en cuyo marco se gestó la Selic-, destacó que en estos días han conseguido el objetivo de trabajar en red. Además, destacó que, por la disposición de los puestos, se está generando un mayor feedback con otras editoras y con el público. «Agora agardamos que a segunda fin de semana sexa mellor», aseguró este representante de la Mesa do Libro. También incidió en que el fin de semana dejó imágenes de personas ligadas al mundo editorial gallego compartiendo corrillos. En cuanto a ventas, explicó que las sensaciones que le trasladan sus compañeros son buenas, destacando que para algunos de los expositores supone la primera vez que acuden a una feria.