Vecinos alertaron de que las farolas del parque de Vite daban calambre

Xurxo Melchor
xurxo melchor SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

XOAN A. SOLER

Cuatro testigos declararon que meses antes de la muerte de Anna Nieto sus perros recibieron fuertes descargas eléctricas

17 ene 2017 . Actualizado a las 21:57 h.

Meses antes de que Anna Nieto Lago, de 15 años de edad, falleciese electrocutada al tocar una farola defectuosa en el parque Pablo Iglesias de Vite varios vecinos habían alertado de que algunas luminarias de la zona daban calambrazos. Así lo han declarado cuatro testigos en el juzgado de instrucción número 2 de Santiago y todos coinciden en que notaron que sus perros recibían fuertes descargas eléctricas, por lo que decidieron dar aviso a través del 112 Galicia o de la Policía Local de Santiago.

Aclarar si las farolas del parque estaban en mal estado y no se hizo lo suficiente desde el Concello para subsanar las deficiencias pese a los avisos de los vecinos es, actualmente, uno de los puntos fundamentales de la investigación sobre la trágica muerte de la joven en la madrugada del 15 de septiembre del 2014. Anna Nieto había ido aquella noche a las fiestas de Guadalupe y recibió una descarga eléctrica mortal al tocar al mismo tiempo el báculo de la luminaria y una barandilla metálica.

Este extremo figura entre los que la sección compostelana de la Audiencia Provincial consideró que no se habían investigado adecuadamente. Por ello, rechazó la decisión de la jueza que instruye la causa, Margarita Guillén Vázquez, de archivar las actuaciones, actuación que había también solicitado la Fiscalía.

Los cuatro testigos que ya declararon en los juzgados -y que deberán volver a hacerlo próximamente- explicaron que habían detectado problemas en las farolas de la zona desde principios del 2014, nueve meses antes del mortal accidente. Uno de ellos relató que su suegra le había contado que un día «los perros hicieron pis en la farola y se quedaron quietos y como llorando» y que días después volvió a pasar lo mismo «y ahí se dio cuenta de que las farolas daban calambrazo, entonces avisó a su hijo, que llamó al 112 para dar aviso de que una de las farolas estaba mal», señaló.

El hijo de esta mujer también declaró como testigo y aclaró que no recordaba si había avisado al 112 o a la Policía Local, pero que después de alertar del mal estado de la farola le llamaron unos operarios a los que llevó al lugar en el que habían detectado el problema y que no sabe si después volvió a suceder o si el problema quedó solucionado.

Otro testigo afirmó que dos o tres meses antes de la muerte de Anna Nieto iba paseando con su perra y cuando pasó al lado de una farola el animal dio un salto. Después del accidente se lo comentó a un jardinero de la empresa concesionaria Cespa y él le dijo que en otra luminaria había problemas y daba latigazos.

Los testigos explicaron que los problemas que ellos detectaron no eran justo en la misma farola que causó la muerte de la joven, pero que todas estaban situadas en la misma zona. También recuerdan que en aquellos días se estaban llevando a cabo unas obras en un aparcamiento situado en las cercanías.

El juzgado intentó que el 112 Galicia confirmase que había recibido aquellas llamadas, pero el servicio autonómico de emergencias no pudo concretarlo, por lo que la magistrada que dirige la investigación les ha cursado nuevas órdenes para que lo hagan. También la Policía Local debe ahora aclarar si tuvieron o no constancia del mal estado de las farolas del parque de Vite antes de que Anna Nieto falleciese electrocutada al tocar una de ellas.

Comparece un técnico municipal

Ayer declaró en el juzgado en calidad de investigado -la figura que antes se denominaba imputado- un técnico municipal encargado del departamento de iluminación y electricidad en la brigada de obras del Concello de Santiago. Es el último involucrado en una investigación en la que ya están investigados trabajadores de Ferrovial -la concesionaria del mantenimiento del alumbrado público- y Atisae, la empresa que certificó el buen estado de la instalación que resultó estar defectuosa.