La restauración de pinturas dilatará hasta el 2020 las obras de la Catedral

Emma Araújo SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

La retirada de los andamios podrá ser una realidad en el 2019 si no hay imprevistos

14 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El calendario de las obras de restauración de la Catedral de Santiago dependerá de la evolución de los trabajos que ahora afean la fachada con andamios y engranajes y también del estado de conservación de las pinturas y retablos de la capilla mayor del templo, ya que para poder acometer esta fase es necesario que el resto de las obras de la Catedral estén completamente terminadas.

Así lo avanzó ayer Daniel Lorenzo, director de la Fundación Catedral, al inicio de la visita privada organizada para los alcaldes de A Coruña, Xulio Ferreiro; y Santiago, Martiño Noriega, en la que Lorenzo ejerció como guía experto.

En base a esta premisa, Lorenzo entiende que si bien la retirada de los andamios de la fachada principal puede ser una realidad en la recta final del 2019, como el lunes avanzó el Arzobispo de Santiago, Julián Barrio, al afirmar que los trabajos podrían estar terminados dos años antes del próximo Año Santo, las obras de restauración de la capilla mayor de la Catedral y de sus pinturas y retablos se prolongarán, con toda probabilidad, hasta mediados del año 2020.

En cualquier caso, este plazo anunciado por Daniel Lorenzo como el más factible dejaría listo el templo para el próximo Xacobeo. Pero para que esta minuciosa restauración de pinturas y retablos pueda comenzar, es necesario, explicó Lorenzo, «que estea lista toda a cuberta, xa que unhas cousas condicionan as outras». Y cualquier retraso o problema en los trabajos de restauración, que en estos momentos se centran en zonas como el cimborrio, pueden provocar una dilatación de las previsiones, que ahora son optimistas, aunque a tenor de los problemas detectados, por ejemplo en el campanario sur, las intervenciones para frenar el deterioro del templo pueden prolongarse.

Uno de los proyectos incluidos en esta intervención, según resaltó Lorenzo, es la restauración de los zócalos de mármol de la capilla mayor, tarea que también deberá quedar lista antes de acometer cualquier intervención en las policromías. A este respecto, Lorenzo avanzó que los estudios sobre su estado están muy avanzados, lo que puede permitir que la investigación sobre la primera fase para preservar estas policromías esté ya lista antes de levantar la cubierta de la capilla.

Más información en la página 5 de la sección de Galicia