El actual edificio de Medicina seguirá siendo de usos universitarios

Susana Luaña Louzao
susana luaña SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

El rector no descarta un acuerdo con la Xunta para compartir dependencias con fines administrativos y protocolarios

08 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Con la Catedral de Santiago de fondo, el presidente de la Xunta y candidato del PPdG a revalidar ese cargo, Alberto Núñez Feijoo, garantizó el martes que se iba a construir una nueva facultad de Medicina, y en lo que respecta al futuro de la actual, aseguró que se había llegado a un acuerdo con la Universidade de Santiago para que ese edificio fuese de uso institucional. Pues bien, si se tienen en cuenta las puntualizaciones que ayer hizo el rector al respecto, eso será así pero a medias.

Juan Viaño quiso dejar claro que el edificio, situado en un enclave privilegiado al lado de la plaza del Obradoiro, seguirá siendo de la universidad y para usos universitarios. «Pero non se van dar clases, polo que non é incompatible un acordo coa Xunta». Es decir, que no se descarta firmar un convenio con la administración autonómica para que las instalaciones sean de uso compartido, pero siempre para fines institucionales y protocolarios, dado que todas las actividades académicas se trasladarán en su totalidad a la nueva facultad que se va a construir junto al Clínico.

No fue la única puntualización que quiso hacer el rector respecto a las futuras infraestructuras universitarias. Como se ha dicho por activa y por pasiva que la construcción de la nueva facultad está vinculada a la venta del antiguo hospital de Galeras, Viaño quiso desmentirlo y aseguró que el inmueble de Medicina se hará independientemente de que se venda o no el viejo hospital. «A construcción non está ligada, se conseguimos vendelo vai vir ben, pero vaise facer igual».

Dos años de plazo

Se hará porque es una necesidad a gritos, dado que el viejo inmueble no cumple los requisitos para albergar una facultad moderna y dotada de las últimas tecnologías para una de las especialidades con más prestigio en la USC. Pero está claro que la venta del edificio de Galeras insuflaría una cierta tranquilidad en lo que a las necesidades económicas del proyecto se refiere, teniendo en cuenta que hoy en día la venta del inmueble está fijada en algo más de siete millones de euros, un dinero que vendría muy bien para iniciar la construcción de un edificio que, de momento, cuenta con un millón de euros aportado por la Xunta para los primeros trámites. Fue también el ejecutivo autonómico el que aportó los 60.500 euros para la redacción del anteproyecto.

La intención es iniciar las obras de la nueva facultad en el 2018. Para entonces es de suponer que se habrá solucionado la situación de Galeras, que ya salió dos veces a subasta y que en ambos casos se quedó sin pretendientes. Ante ese doble fracaso, la USC pretende adjudicarla directamente a la primera empresa que se ajuste a los requisitos fijados, pero para ello es necesario que el Concello de Santiago apruebe una modificación puntual del PXOM que permita añadir fines comerciales a los usos del inmueble y hacer así la oferta más atractiva para los posibles compradores.

Pero no cabe duda de que para financiar el proyecto va a ser necesaria ayuda económica externa. El coste total del proyecto, a expensas de un estudio económico preciso, rondaría los 23 millones de euros, una cantidad elevada para las arcas universitarias, en pleno proceso de recuperación tras una larga crisis económica.

Y si bien es cierto que, como dijo el rector, la facultad se tiene que construir al margen de lo que ocurra con Galeras, también es verdad que hay otros proyectos urbanísticos necesarios para los que vendría muy bien el balón de oxígeno de los 7,2 millones que se ingresarían con la venta del viejo hospital, como la construcción de la nueva Facultade de Medicina o el traslado al Campus Vida de Ciencias da Educación.