«El dibujo es aún más valioso que el idioma; todo el mundo te entiende»
SANTIAGO CIUDAD
El arquitecto invita al peregrino a conocer Santiago a través de su historia dibujada
05 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Su obra se publicó por primera vez en 1987, y entonces llevaba un prólogo de su amigo Torrente Ballester que decía: «Este libro interesa por igual al soñador y al curioso». Casi tres décadas después, sale a la luz la tercera edición de Los orígenes de Compostela. Una historia dibujada, y con ese motivo, su autor, Arturo Franco, profesor en la Universidade de A Coruña, visitó de nuevo Santiago y dejó que se abriera el baúl de los recuerdos: «La primera edición coincidió con la primera feria del libro de Santiago, y fue una de las obras más vendidas». Hoy está de nuevo en la feria del libro, de la mano de la editorial Alvarellos y del Consorcio de Santiago. «Hemos hecho una tercera edición simplificada, más accesible y más didáctica, para un público más amplio; las otras eran más ambiciosas e inasequibles económicamente. El efecto gráfico es el mismo, pero pesa poco y se lo pueden llevar los peregrinos para que conozcan la génesis de la Catedral».
Los dibujos de Arturo Franco no reproducen solo la Catedral, sino todo el casco histórico de Santiago, pero es que, como él bien recuerda, «la Catedral es el origen de Santiago, como pasa con todas las ciudades catedralicias. No es solo un centro espiritual, es una gran empresa que dio trabajo durante siglos a todos los gremios de la ciudad. La Catedral la han construido los peregrinos a lo largo de los siglos».
Sus dibujos del arte y la piedra compostelana abarcan desde las huellas de los romanos al esplendor del Pórtico de la Gloria. «Luego hice una segunda parte, pero en esta me centro en los antecedentes de la propia catedral románica, que van paralelos a la afluencia de peregrinos, el templo iba creciendo según las necesidades de espacio para albergar a los visitantes».
El objetivo con el que se publicó la obra entonces era «analizar el proceso de construcción interpretando los estudios arqueológicos que hicieron otros estudiosos a partir de los restos. Yo no hice una nueva interpretación, solo lo puse gráficamente con un cierto orden cronológico».
Al reconocido arquitecto le sigue gustando dibujar. «Sigo haciéndolo mal, pero algo mejor que entonces -bromea-. Con los años aprendí a dibujar menos relamido. Es una herramienta más valiosa que el idioma porque todo el mundo te entiende. Todos deberíamos saber dibujar».
Arturo Franco dibujó una ciudad que cambió mucho en los últimos treinta años. «La ciudad que yo conocí cuando tenía 18 años y vine a estudiar a Santiago no tenía nada que ver con esta; estaba anclada en el tiempo, todavía se veían los restos de la muralla de Santa Susana. El bum coincidió con la transición política y Santiago tuvo la suerte de tener entonces un alcalde arquitecto, Xerardo Estévez, y vivió una transformación de la que quedaron buenos ejemplos de arquitectura moderna. Lo que vino después es de una importancia menor». Él salva la Cidade da Cultura. «Es una pena que no se pueda finalizar, pero bueno, también la Catedral tardó siglos en hacerse. Es un proyecto que yo defiendo, aunque entiendo que económicamente no era el momento adecuado y que se dejaron de lado otras necesidades».
No comparte las críticas de otros técnicos que advierten que Santiago se está planificando solo para el turismo, y no como un lugar para vivir. «No pasa nada por hacer de Santiago una ciudad turística, siempre lo fue. La gente siempre vino a ver la Catedral».
El autor. Arturo Franco es arquitecto, escritor y dibujante. Nació en A Coruña, donde ejerce como profesor en la Escola de Arquitectura. Es doctor en Arquitectura por la USC.
La obra. «Los orígenes de Compostela» reproduce en dibujos la historia y el arte de la ciudad.