La actriz Mayka Braña relata lo vivido en un vuelo: «No entendemos qué necesidad había de aterrizar en pleno temporal en Santiago»

El suyo fue un desahogo en Facebook, un comentario con el que quiso liberarse de toda la tensión vivida en las últimas horas pero, también, una llamada de atención sobre lo que considera una maniobra innecesaria. La actriz de Marín Mayka Braña, un rostro conocido de una serie de la TVG, se enfrentó el domingo por la tarde a una de esas situaciones de las que nunca se olvidará. Regresaba junto a su marido y su hijo de once años de pasar la Semana Santa en Praga. El viaje de vuelta lo hizo en un Boeing 737-800 de Travel Service, un vuelo chárter en el que viajaban, principalmente, familias.

El avión despegó de la capital checa a las 19.45 horas con llegada prevista a Lavacolla a las 22.45 horas, una travesía que discurrió con normalidad al inicio pero que se complicó a medida que el vuelo se acercaba al aeropuerto compostelano. Mayka Braña aclara que el aterrizaje comenzó en medio de una densa niebla y entre turbulencias cada vez mayores. «El avión se puso casi vertical, parecía que el ala izquierda iba a chocar contra el suelo; el viento nos golpeó fuertemente de lado. El comandante decidió iniciar entonces el ascenso pero daba la sensación, literalmente, de que el aparato ya no tenía potencia para hacerlo. La gente empezó a llorar y a vomitar».

La actriz gallega asegura que, ya de nuevo en el aire, fue cuando el comandante explicó con voz entrecortada y en inglés que «no había pasado por esa situación muchas veces, aún siendo un piloto bastante mayor».

Sin embargo, y a pesar de las dificultades, intentó de nuevo tomar tierra en Lavacolla. «El primero fue horrible, pero el segundo intento fue indescriptible porque ya sabíamos a lo nos que enfrentábamos. Es increíble lo que puede llegar a tambalearse un avión tan grande, sus azotes bruscos, los ruidos que nunca habías escuchado antes... y que logre volver a levantar el vuelo y a enderezarse», recuerda la actriz aún con nervios.

«La verdad es que piensas que vas a morir ahí dentro. No entendemos qué necesidad había de intentar aterrizar en esas condiciones, sobre todo, cuando el viento había provocado desde las 17.00 horas numerosas incidencias en Lavacolla, con desvíos de anteriores vuelos», destaca la actriz.

Tras el segundo intento frustrado, el avión tomó rumbo hacia Oporto, adonde llegó cerca de las 00.30 horas (hora española).

Mayka aclara que la odisea vivida por el pasaje, entre los que había cerca de 200 viajeros, no concluyó ahí. «Sin casi información, nos dejaron dentro del avión durante casi una hora. Fue otro viajero quien cogió el micrófono para explicar que el comandante pedía que tuviéramos paciencia», añade la gallega.

Finalmente, y tras esperar por la llegada de los autobuses, las familias pudieron dirigirse por carretera hacia la capital gallega. El viaje concluyó cerca de las 06.20 horas.

Ya tranquila pero con ganas de relatar lo vivido, Mayka Braña anuncia que pondrá una reclamación en la compañía a la que contrató el viaje tanto por la falta de información y la escasa previsión de no tener listos los autocares en la ciudad lusa como por el doble intento de aterrizar en Lavacolla. «Mientras esperábamos llegó al aeropuerto de Sá Carneiro otro vuelo procedente de Madrid y que también fue desviado. Sin embargo, este avión ya no intentó tomar tierra en Lavacolla», recuerda la gallega.

«Salí de esta pero tengo claro que no voy a querer volar más», concluye la actriz. 

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