Sheila Fernández: «O concerto de Raimon en Santiago foi o punto de partida»

SANTIAGO CIUDAD

CEDIDA

Investigó en su tesis la evolución de la canción protesta en Galicia desde los 60 hasta la democracia

11 feb 2016 . Actualizado a las 11:06 h.

Sheila Fernández, natural de Xinzo, licenciada en Historia en Santiago y Musicología en Oviedo, acaba de obtener la máxima calificación, cum laude, por su tesis doctoral Galicia ollando a Cataluña: dúas fronteiras do movemento da canción protesta (1968-1980), dirigida por el catedrático Carlos Villanueva Abelairas de la USC. Su trabajo se centró en el período de los años 60 y 70, y en el análisis de la evolución de la música protesta gallega hasta la llegada de la democracia. Sheila Fernández concluye que el «punto de partida» del movimiento de la canción protesta en Galicia fue «o recital que o cantautor Raimon ofreceu o 9 de maio de 1967 en Santiago».

A partir de este momento, se alimentó la conciencia de los músicos gallegos que se sumaron a la canción protesta «seguindo as liñas marcadas pola canço catalana». Tras un período de reflexión, los artistas gallegos fijan las líneas «iniciais da canción galega: monolingüe (en galego), de base social, reivindicativa», y totalmente alejada de la música tradicional. Este distanciamiento, según explica la historiadora, es porque «o entendido como folklorista estaba sendo empregada como instrumento do réxime a través dos Coros e Danzas da sección feminina».

En 1968, el germen del concierto de Raimon da sus frutos, y coincidiendo con las reivindicaciones universitarias, se organizan tres recitales en Lugo y Santiago. El primero, el 30 de marzo en la Escola de Peritos Agrícolas en Lugo, que «ainda tendo os permisos foi suspendido e celebrado na intimidade da casa do organizador, o profesor Xesús Alonso Montero». El segundo, en la Facultade de Medicina, el 26 de abril, después de una asamblea; y el tercero, en la que ahora es la sala Capitol, con el «colectivo de Voces Ceibes: Benedicto García Villar, Xabier González del Valle, Guillermo Rojo, Vicente Araguas, Xerardo Moscoso e Miro Casabella». A estos se unirían, en los años 70, Bibiano Morón y Suso Vaamonde. Precisamente «destos concertos saen as liñas do que será a canción protesta galega».

Si bien durante los primeros años, previos a la llegada de la democracia, la canción protesta de Galicia bebe del espíritu catalán, con la llegada de la democracia el «proceso de maduración da nosa canción adquire como referente Portugal». «Ca democracia, a política queda noutro plano e a música galega reorientase cara a identidade» y vuelve a mirar hacia la música tradicional «co perfil reivindicativo da identidade», e con modelos como Fuxan os Ventos o Milladoiro.