Brañas de Sar, el gran cinturón verde que quedó varado con las mudanzas en Raxoi

Domingos Sampedro
domingos sampedro SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

El PSOE emplaza al ejecutivo local a desempolvar el plan de expropiaciones para proteger mejor los terrenos

25 ene 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Muy pronto se cumplirán cuatro años de la aprobación del plan especial de las Brañas de Sar por parte del pleno del Concello de Santiago. Aquel proyecto tan mimado por la entonces concejala de Urbanismo, Mercedes Rosón, y el alcalde Sánchez Bugallo pretendía transformar las riberas del río Sar, entre Pontepedriña y Fontiñas, en el mayor parque municipal de la ciudad, un cinturón verde de 49,2 hectáreas salvaguardadas de cualquier operación inmobiliaria. Y pese a que la adquisición de los terrenos tuvo dotación presupuestaria del Consorcio durante tres años, lo cierto es que el proyecto quedó varado definitivamente, al menos en su concepción original, con los sucesivos cambios de Gobierno en Raxoi.

Ya durante la aprobación del plan especial, el PP de Conde Roa rechazó el proceso de municipalización de los terrenos de las Brañas de Sar como método de blindaje ante cualquier pelotazo urbanístico. Así que cuando cambió el Gobierno, tres meses más tarde, el plan especial quedó guardado en el cajón sin que nadie volviera la vista sobre él, mientras se enfriaban a la par otros planes añadidos para esta zona, como la construcción del Centro nacional de las Ciencias del Patrimonio, adscrito al CSIC, proyectado para la zona más próxima al pabellón del Sar, o la estación intermodal, que la Xunta intenta acelerar ahora.

El actual Ejecutivo municipal de Compostela Aberta también dejó claro que discrepa del modelo socialista para las Brañas de Sar al apostar, más que por la titularidad de los terrenos, por la mejora de la protección jurídica de los mismo mediante la declaración de espacio natural de interés local, lo que en la práctica también refuerza el blindaje ante cualquier operación especulativa.

Lo imprescindible, expropiar

No obstante, el PSOE entiende que es el suyo el plan que ofrece más garantías, pues el blindaje se puede caer con un cambio del plan general aprobado por mayoría absoluta. «Lo más necesario, lo imprescindible, es publificar las Brañas de Sar», manifestó Francisco Reyes, portavoz municipal de los socialistas, quien llama así a retomar el plan de expropiaciones que tuvo reflejo en los presupuestos del Consorcio.

Y es que dentro del área delimitada en el plan especial hay 365.000 metros cuadrados de terreno que pertenecen a unos 500 particulares. El Concello, por su parte, es propietario de otros 127.000 metros cuadrados. La ejecución forzosa de los primeras permitiría crear un espacio público de 49,2 hectáreas de titularidad municipal. Esto convertiría las riberas fluviales en el principal pulmón verde de la ciudad, solo por detrás del monte Pedroso, que abarca una superficie forestal de 66 hectáreas, de las cuáles la Xunta posee una mitad de ellas y el Concello la otra, unas 33 repartidas entre la Selva Negra y la Granxa do Xesto.

El portavoz municipal del PSOE de Santiago, Francisco Reyes, explicó que su formación redoblará los esfuerzos ante el Concello y el Parlamento gallego para blindar las Brañas de Sar ante cualquier operación especulativa. Y advirtió de que dicho blindaje nunca estará completo mientras el suelo no sea de carácter público. «Ahora hay una protección sobre el 90 % de la superficie de las Brañas de Sar -apunta Reyes-, pero el plan general se puede cambiar fácilmente con una mayoría absoluta». Es más, Reyes apunta que en el pleno celebrado la semana pasada ya se vio un ejemplo de lo «sencillo» que es modificar un plan general «a petición de parte». Ocurrió mediante un acuerdo entre Compostela Aberta y el PP para alterar el planeamiento en torno a la gasolinera de A Rocha y dotarla de un carril de acceso. «La de Compostela Abierta y el PP es una pinza que también funciona», se quejó Reyes.