La sede gallega de la soberanía popular revive en O Hórreo su trayectoria centenaria

JOEL GÓMEZ SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

Antes de su uso institucional por el Parlamento de Galicia, el Pazo fue Escuela de Veterinaria de Galicia y cuartel

03 oct 2015 . Actualizado a las 04:00 h.

Con el descubrimiento de dos placas, una exposición, y una jornada de conferencias de carácter político e histórico, el Parlamento de Galicia conmemoró ayer el centenario su sede, el Pazo o Casona do Hórreo. Antes albergó la Escuela de Veterinaria de Galicia, entre el 2 de octubre de 1915 y 1924, y en los últimos años de ese etapa comenzó allí la Misión Biológica de Galicia, con Cruz Gallástegui; y fue cuartel militar desde 1925. Antonio Rosón y Fernández Albor, como presidentes del Parlamento y de la Xunta, firmaron su compra en 1986 para su actual uso.

Cargos actuales, y de años anteriores, de ambas instituciones, además del alcalde de Santiago, el Fiscal Superior de Galicia, la Valedora do Pobo, diputados, senadores, el presidente del Consello da Cultura Galega, y otras personalidades asistieron a la celebración. En el acto se destacó la figura de Eugenio Montero Ríos, político compostelano que asistió en marzo de 1903 a la colocación de la primera piedra del Pazo; y también promovió el edificio donde se ubica la Xunta, en San Caetano, según se recordó.

La presidenta del Parlamento, Pilar Rojo, destacó «a influencia decisiva que esta construción ten exercido sobre o seu entorno inmediato e tamén sobre o conxunto da trama urbana de Santiago de Compostela». Se levantó «formando parte da entón cidade do futuro». Se hizo una «obra funcional e versátil» que, sin necesidad de someterse a grandes reformas, acogió tres usos completamente diferentes: docente, militar e institucional.

«

Continuidade

histórica»

Antes de O Hórreo, el Parlamento tuvo dos sedes, provisionales: los pazos de Gelmírez y del Hórreo. En los inicios de la autonomía se planteó el dilema «entre hospedar a sede da soberanía popular nun recinto que fora novo, que fora espectacular, e que reflectira tamén ese desexo de deixar atrás o pasado; ou nun recinto que estivera cheo de tradición, e que dera tamén idea de continuidade», indicó el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda. Se entendió que «a gran fortaleza de Galicia tiña que residir na continuidade histórica», y por eso se eligió este edificio de O Hórreo, agregó.

Rueda indicó que «os anceios de autonomía sempre permaneceran vivos; en todas as épocas houbo galegos e galegas que sentiron e expresaron o latexo do noso país e que o plasmaron en costumes, en cantigas, arte, libros, e en edificios e monumentos que van desde as cruces de pedra estudadas por Castelao á Catedral de Santiago».

Ramón Villares, José Ramón Soraluce, Diego Conde, Juan Rodríguez Villasante, Tomás Pérez Vidal y Xosé Luís Barreiro Rivas recordaron la trayectoria del Pazo do Hórreo en su primer centenario.

Pilar Rojo agradeció a la Facultade de Veterinaria de la USC, al Museo de Veterinaria Militar, al Arquivo Militar de Ferrol y a La Voz de Galicia su colaboración para la exposición.

«O edificio influiu no seu entorno inmediato e sobre o conxunto da trama urbana de Santiago»

Pilar Rojo