Nuevas huellas del hombre de Neandertal en Triacastela

Francisco Albo
Francisco Albo MONFORTE |

SANTIAGO CIUDAD

La campaña de excavaciones iniciada en Cova Eirós la semana pasada ya está dando sus primeros resultados

17 ago 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

La nueva campaña de excavaciones en el yacimiento paleolítico de Cova Eirós (Triacastela), iniciada la semana pasada, ya ha proporcionado un buen número de materiales arqueológicos y restos de fauna. Los responsables de los trabajos confiaban empezar a realizar nuevos hallazgos tan pronto como se reanudasen los sondeos y sus previsiones se han cumplido. De momento se han hallado en torno a 150 piezas y aunque entre ellas no hay por ahora ninguna de carácter excepcional, en conjunto presentan un gran interés para reconstruir los diversos períodos prehistóricos que dejaron sus huellas en la cueva.

Según indica Arturo de Lombera, codirector de los trabajos, en torno a un 60% de las nuevas piezas son artefactos de piedra, mientras que el resto son fragmentos de fósiles de diversos animales. La mayor parte de estos materiales pertenecen al yacimiento neandertal descubierto en la cueva en el 2008. También se han realizado diversos hallazgos en los demás niveles arqueológicos de la gruta, mucho más recientes, que corresponden a diversas etapas del Paleolítico Superior. En todos los casos, los nuevos materiales son coherentes con los hallados anteriormente en este lugar.

El equipo que lleva a cabo las excavaciones -encuadrados en el proyecto «Ocupaciones humanas durante el Pleistoceno Medio en la cuenca media del Miño», coordinado desde el 2006 por la Universidad de Santiago»- espera seguir realizando nuevos hallazgos, ya que la campaña seguirá hasta fin de mes. Pero el yacimiento está seguramente lejos de agotarse, ya que los sondeos con georradar indican que el subsuelo de la cueva tiene una profundidad de más de tres metros. En las anteriores campañas solo se había llegado a poco más de un metro.

Los arqueólogos desconocen por ahora la antigüedad de las piezas que están extrayendo del yacimiento neandertal de Cova Eirós, aunque saben con certeza que superan los 84.000 años. Esta es la edad que asignaron las dataciones radiométricas a los artefactos y los restos de fauna descubiertos en el verano del 2008 en el mismo lugar. Los materiales que se están descubriendo actualmente se encuentran en un nivel más profundo del subsuelo de la cueva y por lo tanto corresponden a una época aún más remota, pero su cronología exacta no podrá conocerse mientars no se realice una nueva datación.

Para determinar con precisión la antigüedad de estos materiales no servirá la conocida técnica del carbono 14, cuyo límite temporal está en torno a los 40.000 años.