La señal de Internet llega muy despacio y con poca cobertura

Raquel Pazos

SANTIAGO CIUDAD

La red del casco histórico compostelano impide el acceso a programas de intercambio de archivos como el Emule

05 abr 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

«Agora xa o tes todo», anuncia la página web de Baudia, la red wifi que el Ayuntamiento de Santiago acaba de instalar en el casco histórico, una vez que uno consigue conectarse para poder navegar libremente por Internet. En realidad, lo que se encuentran los usuarios que escogen esta forma de conexión es una velocidad muy baja que en ningún caso supera los 500 kilobytes.

Las plazas de la Universidade, Mazarelos, A Quintana, Platerías, Fonseca, Praza de Abastos, Obradoiro, Cervantes, Porta do Camiño, Toural y el parque de Belvís son los escenarios en los que los usuarios pueden conectarse a esta red wifi. La tarea es simple, basta con acomodarse junto al portátil en alguno de estos lugares, seleccionar la red iCompostela y ponerse a navegar.

Hay que tener en cuenta que la cobertura puede no ser la mejor ya que, por ejemplo, en las escaleras de Platerías es prácticamente inexistente. Ante problemas como este, solo hay que pasearse un poco por la plaza hasta encontrar un punto donde la señal tenga una intensidad «muy buena» o «excelente». Otro mensaje posible es el de «conectividad limitada o nula», que aparece unos segundos en lugares como el Toural, para continuar con una conexión totalmente normal. Antes de poder consultar las páginas deseadas, todavía hay que acceder al servicio propiamente dicho a través de la página de Baudia, que aparece automáticamente en la pantalla al iniciar el explorador. De esta manera, el usuario se entera de que el servicio está todavía en pruebas y que puede quedarse sin cobertura en cualquier momento del proceso.

Los test de velocidad no mienten y la red gratuita del casco histórico no pasa este particular examen con una buena nota. iCompostela apenas alcanza 500 kilobytes (o lo que es lo mismo, medio mega) en la velocidad de descarga, unas cifras que están muy lejos de lo que ofrece cualquier operador de ADSL.

A pesar de ser una velocidad muy baja para lo que ofrecen las compañías de telecomunicaciones actualmente, la conexión permite hacer varias consultas simultáneas y descargar archivos con total normalidad. El problema viene cuando el usuario intenta conectarse a alguna red de intercambio de archivos P2P, como el famoso Emule. La conexión a este tipo de programas, al igual que sucede desde otras redes inalámbricas como la de la USC, no está disponible.

Lentitud, problemas de cobertura y alguna limitación en el acceso a los contenidos son algunas de las características de esta red wifi, que sin embargo supone una opción totalmente gratuita para aquellas personas que quieren conectarse a la red en la zona vieja. Y es que, aunque sea despacio, los nuevos medios se hacen un hueco en el casco viejo.