Las lluvias provocan un desprendimiento en la AC-543, en Rois
17 feb 2018 . Actualizado a las 14:12 h.Terminaron los avisos amarillos por lluvia que desde el martes venían afectando a la provincia de A Coruña, sobre todo al suroeste -zona Muros-Noia, Barbanza y Sar-, así como a todo el interior de la provincia. Hasta las ocho de la tarde de ayer, los mayores registros de lluvia fueron los 72 litros por metro cuadrado en Lousame, o los 52 de Santa Comba. En Santiago, la estación que MeteoGalicia tiene en el campus superó los 40 litros. En lugares como Santa Comba o Negreira, los vecinos se lo toman con resignación, deseosos como la mayoría de ver el sol.
Las incesantes lluvias de los últimos días dejaron las típicas estampas invernales, con cunetas llenas de agua o regatos que apenas la tenían hace dos meses y que ahora bajan desbordados hacia el Ulla, el Xallas o el Tambre. Este último llegó a su máximo nivel en Pontemaceira.
Las lluvias provocaron un desprendimiento de tierras que ocasionó el corte de la carretera comarcal AC-543, que une Santiago con Noia, a la altura del kilómetro 13,1 en el municipio de Rois, inutilizando dos de los tres carriles. Fue un particular el que alertó al 112 a las 6.00 horas de ayer, por lo que durante toda la mañana operarios de Conservación de Estradas se emplearon a fondo para retirar la tierra acumulada en la calzada.