Los vecinos de Urdilde, en Rois, reciben los servicios bancarios a través de un furgón

Uxía López Rodríguez
uxía lópez ROIS / LA VOZ

ROIS

PACO RODRÍGUEZ

La oficina móvil se desplaza los viernes, pero hay cajero automático permanente

19 feb 2022 . Actualizado a las 05:05 h.

Como si fuera, pan, pescado o la bombona de gas butano, el núcleo de Urdilde, en el municipio de Rois, recibe los servicios bancarios en furgón, que se moviliza un día por semana desde hace varios años. Es de la entidad Sabadell Gallego, creada tras la fusión con el banco que existió en el lugar, el Gallego. El furgón aparca frente a la oficina que estuvo abierta muchos años y en la que mantiene en funcionamiento un cajero automático.

El horario es de 9 de la mañana a 2 de la tarde y todo lo que hay en una oficina física lo hay también en la móvil, incluido un guardia de seguridad. Antes, el furgón iba a Urdilde dos días por semana, pero hora y media cada uno y ahora es uno toda la mañana. Hay vecinos que agradecen el servicio, pero a la fuerza, como dice uno. «Non hai máis remedio que conformarse», señala este usuario. Otro considera que el furgón «podía vir máis días ou, mellor aínda, podían volver a abrir a oficina e atender nela», algo en lo que coinciden más consultados. Según les consta, el inmueble aún está alquilado por la entidad, que tiene allí un cajero automático, por lo que no entienden por qué cerraron la atención en mostrador. «A este paso quedamos sin nada, como está pasando en todo o rural», señala otra persona, que recuerda que en Urdilde también hubo oficina de Abanca, que cerró. Después de hacerlo, prestó el servicio dos días a la semana, que finalmente redujo a uno y, con la pandemia, «aproveitaron para quitarnos todo», lamenta, pese a que la entidad atendía en un local cedido.

Para remontarse a un Urdilde sin oficina bancaria hay que ir a más de 60 años atrás, cuando abrió la primera corresponsalía de Hijos de Olimpio Pérez, que después pasó a Banco de Créditos e Inversiones y, finalmente, Gallego y Sabadell.