La familia de Reibó que perdió el animal vive pegada al monte
10 nov 2021 . Actualizado a las 22:29 h.Una familia de Reibó, en la parroquia de Sorribas de Rois, perdió a uno de sus perros y el otro resultó herido en un ataque que achaca al lobo, una vez que su vivienda está pegada al monte. Ocurrió hace una semana, poco antes del anochecer, cuando Manuel Vigo y Victoria Blanco echaron en falta a uno de sus perros y el otro llegó a casa «molladiño e todo ferido, case non andaba», relata el primero de ellos.
«Este can morde e debeuse defenderse mentres o outro non debeu ser capaz», cuenta el vecino de Reibó que, junto con su mujer, no esconden el disgusto por haber perdido a uno de sus animales de compañía.
«O can que quedou veu sangrando por un lado e quedou uns días ferido», asegura Manuel Vigo a lo que su mujer añade que «quedou moi asustadiño; botou máis dunha semana que nin a nós nos quería, non o podíamos tocar e aínda ten desconfianza».
Sobre lo sucedido, no tienen duda. «¿Quen ía ser, se non é o lobo?», pregunta el vecino de Reibó, que cuenta que una aldea próxima también se registró un ataque a ovejas. «Miramos ben por aí a ver se o can aparecía, pero nada, nin rastro del», añade Manuel Vecino que se pregunta «¿para que botan os lobos? ¿Fanlle algún ben ao medio ambiente ou é para amolar ao próximo?».
Ambos perros fueron recogidos hace años por esta familia, que asegura que en una finca próxima hay pisadas del lobo. Por ello, al perro que les quedó le pusieron un collar para salir a pasear siempre con él atado y que no vaya hacia el monte. «Se nos colle a nós o lobo, que non nos valemos, alá imos tamén», afirma con pena Victoria Blanco.