Buxán mejora la torre de la fachada de la iglesia para evitar filtraciones de agua

Uxía López Rodríguez
uxía lópez ROIS / LA VOZ

ROIS

MERCE ARES

Con la colaboración económica de los feligreses, en los próximos días comenzarán las obras de mantenimiento y limpieza

03 jul 2019 . Actualizado a las 05:10 h.

La iglesia parroquial de San Xoán de Buxán, en Rois, ofrece una imagen poco habitual con la torre del campanario llena de andamios. A propuesta del cura párroco Aureliano Alcalá y con la colaboración económica de los feligreses, en los próximos días comenzarán las obras de mantenimiento y limpieza de la torre, además de arreglar el desagüe de piedra, todo ello con el objetivo de que no filtre agua al interior.

Ese desagüe está atascado y hay que limpiarlo y buscarle salida al agua, explica el constructor, de la empresa Construcciones R. Rodríguez de Teo. De hecho, según afirma el cura, en invierno la torre mete mucho agua de modo que los últimos bancos de la iglesia «se llenan de agua» y de ahí la obra prevista, que tiene un plazo aproximado de un mes.

La limpieza incluye la retirada de las hierbas que crecen en las juntas de las piedras, que es una de las principales causas para la filtración de agua al interior. Este es, de acuerdo con el cura, el «problema más gordo» que tiene a día de hoy el templo de Buxán.

La obra es similar a la ya realizada en otras dos iglesias parroquiales que tienen a Aureliano Alcalá como responsable: la de Ermedelo y la de Aguasantas, ambas en Rois. Como en ambos lugares, en Buxán la obra se financia con los donativos de los feligreses que, según el sacerdote, «colaboran muy bien». Alcalá asegura que le gusta que las iglesias a su cargo «estén decentes, bien arregladas por fuera y por dentro». En el interior de la de Buxán, añade, «ya hemos hecho bastante» y quedaría pendiente la restauración de dos retablos, según cuenta el sacerdote.

La iglesia de la parroquia de Buxán es de estilo barroco, de mediados del siglo XVIII. Según la tradición, el templo original estaba localizado en la Aldea Grande y es posible que, cuando decidieron trasladarlo, usaran algunas piezas de la antigua, como así se percibe en los muros. En el entorno destaca la antigua escuela parroquial, levantada en 1898 con dinero recaudado entre los vecinos de la parroquia, incluidos los emigrados.