La actividad de la destilería de Rois provoca quejas de vecinos de la zona

Uxía López Rodríguez
uxía lópez ROIS / LA VOZ

ROIS

CEDIDA

Un ganadero relaciona la mortandad de sus animales con el humo de la empresa

27 oct 2017 . Actualizado a las 00:01 h.

Hace años que vecinos de Rois, de aldeas como Contimunde o Dices, vienen denunciando las molestias que causa la actividad de la destilería situada en el primer núcleo, sobre todo por la emisión de una cantidad importante de gas (humo) a la atmósfera, en la que permanece al tratarse de una zona de valle. Uno de esos vecinos es, además, ganadero y asegura que la actividad de la empresa le está afectando negativamente a su explotación de vacas de leche.

Destilerías Compostela (así se llama) está situada a pocos metros de su establo, que más de una vez se llena de humo procedente de la empresa de destilación, según cuenta el ganadero. Así, explica que tiene muchos animales con «problemas respiratorios», sobre todo en la recría, tal y como lo acredita un certificado veterinario, que añade que, pese a instaurar el plan de vacunación correspondiente, «los casos clínicos no remiten». Por ello, el ganadero asegura que «teño moita mortandade».

Entre las últimas bajas está un becerro de carne que, semanas atrás, mandó al matadero para consumo propio, pero tenía los «pulmóns destrozados» y tuvo que ir para quemar. El ganadero lo relaciona con el humo de la destilería y asegura que no puede más.

Por ello, no para de remitir denuncias por correo a la Dirección Xeral de Calidade Ambiental de la Xunta, acompañadas de fotografías. Una de las últimas data del día 19 y tiene respuesta de la subdirección xeral de Coordinación Ambiental, en la que le señala que el Servizo de Intervención Ambiental está actuando en este tema.

Hace dos semanas el Grupo de Emergencias Supramunicipal (GES) con sede en Padrón recibió una llamada de un incendio en la zona, a la vista del humo que había. No obstante, se trataba del que procede de las chimeneas de la destilería, pese a que pocos metros de la empresa se ubica el colegio de Os Dices y la guardería municipal de Rois.

«Estamos apestados», asegura un vecino de la zona. El alcalde, Ramón Tojo, recogió las quejas y se las trasladó a la conselleira de Medio Ambiente, de modo que Beatriz Mato dijo que se interesaría por el tema.

También el grupo socialista de Rois se ha hecho eco de las protestas vecinales y habla de la necesidad de «lograr unha solución froito do diálogo de todas as partes implicadas», entre las que menciona a vecinos, corporación municipal, empresa y Medio Ambiente, orientada «ao cese da emisión destes gases que tanto trastorno causan entre veciños e viandantes da zona, máxime se temos en conta a existencia dun colexio e unha gardería na súas proximidades».

Este grupo quiere dejar claro que no busca el cierre de la destilería, pero si tomar medidas para que sea una «actividade industrial sostible e respectuosa coa sociedade e o medio ambiente».

La Xunta dice que cumple con los valores establecidos

Destilerías Compostela aseguró ayer, a través de un comunicado, que el resultado de la investigación realizada por la Xunta «constata el buen proceder de la empresa e indica que, según las condiciones climáticas, tendrá que hacer paradas puntuales, tal y como se está realizando actualmente». También señala que encargó un informe medioambiental a una asesoría independiente, que «concluye que no existe ningún tipo de infracción ni hecho ilícito imputable a la empresa».

Esta añade que, atendiendo a las circunstancias climáticas y de conformidad con la administración medioambiental, ha adoptado «las medidas solicitadas por la misma, parando puntualmente las tareas de destilación cuando la situación lo requiera».

Destilerías Compostela reitera, asimismo, «el cumplimiento de cualquier instrucción recibida por parte de la administración competente al efecto».

Por su parte, la Dirección Xeral de Calidade Ambiental asegura que tiene constancia de las quejas y molestias que está generando esta empresa, por lo que, añade, está llevando a cabo «inspeccións ás instalacións para comprobar as denuncias e analizar as posibles medidas para corrixir as deficiencias que se atopen».

También indica que la destilería está dada de alta en el registro gallego de emisiones (Regade-CAPCA), de modo que se realizan «controis anuais desde o 2011, aínda que están obrigados a facelos cada dous ou tres anos». Informa, asimismo, que la destilería «cumple cos Valores Límite establecidos». Desde el organismo de la Consellería de Medio Ambiente explican que, debido a la meteorología de las últimas semanas, «as emisión atmosféricas non se dispersaron coa normalidade propia desta instalación, podendo afectar a fincas próximas». Por último, apunta que la empresa, «desde a primeira inspección, xa estableceu medidas co fin de non prexudicar aos veciños», aunque la Xunta le indicó que, de continuar estas condiciones meteorológicas, «deberán facer parada nas emisións das chimeneas».