Padrón solicita una subvención de 2,6 millones para la rehabilitación integral de su mercado de abastos

Uxía López Rodríguez
uxía lópez PADRÓN / LA VOZ

PADRÓN

MERCE ARES

La actuación propuesta consiste en la recuperación de la relación entre el espacio urbano del Campo del Souto y el Sar, e incluye una nueva pasarela sobre el río

18 jun 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

El Concello de Padrón tiene solicitada una subvención de 2,6 millones de euros para un proyecto de rehabilitación y reforma integral del edificio de la plaza de abastos. La solicitud está dirigida a la Xunta, con el fin de optar a los fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno del Estado, para canalizar los fondos destinados por Europa a reparar los daños provocados por la crisis del covid.

Según explica el alcalde Antonio Fernández Angueira, del importe total del proyecto, casi 540.000 euros serían aportados por el propio Concello. En cuanto a la actuación, contempla una recuperación integral del edificio, en un proyecto que el propio regidor califica de ambicioso pero también viable, siempre y cuando reciba la financiación necesaria y también los permisos, como el de Patrimonio y Augas de Galicia.

A escala urbana, la actuación propuesta consiste en la recuperación de la relación entre el espacio urbano del Campo del Souto y el río Sar. Para ello, se abrirían huecos en la pared de fondo de la plaza, que también permitirían el acceso a una nueva pasarela peatonal sobre el Sar, pegada a la plaza y que vuela sobre el río, en paralelo al Camino Portugués que discurre frente a la fachada principal del mercado a su paso por el Souto.

Con esta nueva pasarela, los peregrinos dejarían de pasar por el aparcamiento del Souto para caminar por detrás de la plaza hasta el Paseo del Espolón. La rehabilitación contempla también la mejora de su eficiencia energética, que se consigue al dotar al conjunto de climatización con aerotermia y ventilación con recuperación de calor, de modo que se garantiza un confort óptimo del edificio resultante.

En el interior, además, se reubicarían los puestos de venta como islas emplazadas en el centro de las naves permitiendo la circulación perimetral; la adecuación y dotación de los servicios higiénicos y espacios de servicio necesarios, como oficios, almacén o cuartos de instalaciones. También se incorporarían espacios destinados a restauración y formación, siguiendo la tendencia aplicada en otros mercados, en los que la restauración sirve como elemento de impulso del producto local, que se compra fresco en el mercado y se prepara en el mismo edificio.

La plaza está formada por cuatro naves conectadas entre sí. La primera de ellas data de 1901.