«El daño estaba hecho antes de tomar las medidas»

Margarita Mosteiro Miguel
marga mosteiro SANTIAGO / REDACCIÓN

PADRÓN

Manuel Vidal, director del hotel Scala de Padrón
Manuel Vidal, director del hotel Scala de Padrón PACO RODRÍGUEZ

29 dic 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

El hotel-restaurante Scala, en Padrón, es conocido en Santiago y entorno por sus fiestas de Fin de Año con baile. Cada año reúne en su salón de eventos a cientos de personas para despedir el año participando en la cena y en el baile posterior. Y muchos de estos asistentes se quedan en las habitaciones del establecimiento. Ya el año pasado el «cierre supuso un problema, pero era algo previsto. Veníamos de una situación mala, en la que era fácil prever que no habría fiesta de Fin de Año», dice.

En cambio, este año «todo nos hacía pensar que podría hacer la cena». Vidal apuntó que hasta el 5 de diciembre «funcionamos muy bien, pero los mensajes de incremento de contagios hicieron que apareciera el miedo, y se cancelaran reservas». En su establecimiento pasaron de 710 para cenar el 31 de diciembre a principios de mes a 80, la pasada semana. Fue entonces cuando Óscar y Manuel Vidal decidieron anularlo todo. Manuel aseguró, antes de conocer las medidas, que «sean las que sean, el daño ya está hecho», sentenció. En su caso, la previsión del cierre le permitirá mitigar «un poco» las pérdidas, pero reconoce que muchos locales que intentaron aguantar hasta el final «tendrán importantes pérdidas». Los hermanos Manuel y Óscar decidieron dar «libre a todo el personal. Las reservas del hotel también cayeron, y si hay algunos, no vale la pena tener aquí al personal».