La renovación del bono eléctrico afecta a más de 19.500 familias de Santiago y su área

Margarita Mosteiro Miguel
Marga mosteiro SANTIAGO / LA VOZ

PADRÓN

SANDRA ALONSO

Su tramitación sigue provocando largas colas en la oficina de Gas Natural Fenosa de Carreira do Conde

05 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Los vecinos de Santiago no son los únicos interesados. Otros muchos del área metropolitana tienen que desplazarse a Compostela para realizar en persona la renovación del bono social, una ayuda regulada por el Gobierno con la que se busca combatir la pobreza energética y garantizar el suministro para las rentas más bajas. Aunque la comercializadora Gas Natural Fenosa ofrece la posibilidad de hacer este trámite por correo electrónico e incluso en su propia página web, los clientes prefieren hacer la gestión físicamente para evitar problemas telemáticos y, sobre todo, para solventar sus dudas acerca de la documentación. En la comarca, la empresa también cuenta con otra oficina en Padrón, donde pueden realizarse sus gestiones los clientes de esa zona. El mayor problema está en la oficina de Carreira do Conde, en la que la que se forman largas colas en hora punta para desesperación de los afectados.

En la veintena de municipios del área hay 19.506 hogares que disponen del bono social, según Gas Natural Fenosa. A este número habría que sumar el de las otras muchas comercializadoras del suministro eléctrico, sin embargo, la cifra facilitada por la empresa matriz ofrece una radiografía bastante próxima a la situación real, pues concentra a cerca del 80 %.

Santiago, como es lógico por población, es concello que cuenta con mayor número de beneficiarios del bono. Teo y Ames superan el millar de usuarios, cifra a la que se aproximan otros con muchos menos habitantes como Arzúa, Ordes y Padrón.

Cuando finalice el proceso de renovación, gran parte de los actuales beneficiarios se quedarán sin descuentos, y verán como se dispara espectacularmente la factura eléctrica de sus hogares.

La empresa insiste ante la masiva afluencia de beneficiarios en que el plazo se prorrogó hasta octubre

 

 

La campaña de renovación está provocando desde hace unas semanas colas en la oficina compostelana de la comercializadora del servicio eléctrico, dado que inicialmente el plazo para la renovación finalizaba este martes y muchos clientes no recibieron el aviso de la ampliación hasta octubre. Coincidiendo con el envío de los recibos del primer trimestre del año, las empresas remitieron folletos informativos acerca de lo que deberían hacer para renovar el bono. Y, pese a que se abrió una prórroga en marzo, muchos de los usuarios siguen desconociendo que tienen aún varios meses de margen para esta gestión.

De hecho, aquellos hogares que actualmente cuentan con el bono social, seguirán disfrutando del mismo hasta octubre, incluso aunque ya no cumplan los requisitos. Solo después de esa fecha, quienes no tengan completada la solicitud y se les confirme que incumplen las nuevas condiciones perderán los descuentos.

En el sistema anterior, la tarifa equivalente al bono social se aplicaba a todo el que tenía contratado el Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC) con una potencia igual o inferior a 10 kW en la vivienda habitual. A partir de octubre a esta condición se suma la renta anual de la unidad familiar, que debe oscilar entre los 11.279 y los 18.799 euros, según el número de miembros; o entre 5.639 y 9.399 euros si se forma parte de los colectivos en situación vulnerabilidad severa, algo que deberá acreditarse con un certificado de los servicios sociales municipales. En función de la situación económica, los descuentos son de entre el 25 % y el 40 % para los hogares que justifiquen estar en una situación de riesgo de exclusión social.