Santiago registra el peor saldo vegetativo de los últimos 15 años

Montse García Iglesias
montse garcía SANTIAGO / LA VOZ

OROSO

Álvaro Ballesteros

El número de fallecidos superó en 120 al de nacimientos durante el 2017

06 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Santiago cerró el año 2017 con el peor saldo vegetativo de los últimos tres lustros. El número de óbitos registrados superó en 120 al de nacimientos. Para encontrar un desequilibrio superior a favor de los fallecimientos hay que remontarse hasta el 2003: 121 muertes más que recién nacidos empadronados en el ejercicio. Este balance negativo aún toma mayor relevancia si se comparan las últimas cuatro décadas. Desde 1975 -primer año del que el Instituto Galego de Estatística ofrece datos municipales-, el 2003 y ahora el 2017 son los ejercicios en los que la balanza demográfica más se inclina hacia el lado de las defunciones.

Este peor saldo vegetativo de Santiago tiene gran parte de su explicación en la caída de la natalidad registrada: se empadronaron 108 niños menos que en el 2016 (-11,9 %), cuando la capital gallega había logrado casi equilibrar la balanza demográfica.

Si durante el ejercicio 2016, Compostela presentaba el mejor saldo vegetativo de las ciudades gallegas, al superar únicamente las defunciones a los nacimientos en cinco, el pasado año cedió ese cetro en favor de Pontevedra, según los datos de movimiento natural de población que recientemente ha dado a conocer el Instituto Galego de Estatística (IGE). En la capital del Lérez los fallecimientos superaron a los bebés empadronados en 112.

Sin embargo, el resto de ciudades presenta unos valores mucho peores que Santiago. En A Coruña el saldo vegetativo es de -731; en Ferrol, de -517; en Vigo, de -466; en Ourense, de -403; y en Lugo, de -187.

Ames y Oroso, en positivo

En el área compostelana se mantienen Ames y Oroso, de nuevo, como los únicos municipios en los que los nacimientos superaron a las defunciones. En el concello amiense son 139 más y en Oroso, trece. Sin embargo, también han visto como en los últimos años esa diferencia se está reduciendo poco a poco y la balanza tiende a igualarse.