En la alameda de Góis y 36 establecimientos de Oroso se agotaron 3.500 kilos de truchas

La Voz SANTIAGO / LA VOZ

OROSO

PACO RODRÍGUEZ

El buen tiempo favoreció la afluencia a la cita gastronómica de interés turístico, que se complementó con cultura y deporte

15 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Entre la degustación en la carpa de la alameda de Góis, en Sigüeiro, y en 36 establecimientos de Oroso que se adhirieron, se agotaron los 3.500 kilos de truchas preparados para la vigésimo primera edición de la Festa da Troita. Esta cita gastronómica de interés turístico volvió a ser un éxito. Lo favoreció el buen tiempo, tras la lluvia que ocasionó cambios en la programación del sábado. Ayer, desde antes de mediodía, y en especial a última hora de la mañana cuando se aproximaba la hora de la comida, se notó la afluencia de visitantes, que ocasionó tráfico lento en la entrada a Sigüeiro, sobre todo procedente de Santiago.

María de Lurdes Oliveira Castanheira, alcaldesa del municipio portugués de Góis, próximo a Coímbra, que está hermanado con Oroso, fue esta vez la pregonera. Resaltó que también la trucha tiene interés allí, y hay un río donde se celebró esta semana una prueba del campeonato nacional. Además, resulta de interés en la gastronomía local, dijo.

Castanheira, con los alcaldes de Oroso, Ordes y Frades, y el edil de Cultura de Oroso y coordinador de la fiesta, Luís Rey, entregaron los premios de los concursos de pesca, pasadas las 13.30 horas. Ganaron Diego Angueira Rial en la categoría de adultos y Pablo Carnota Martínez en la de infantil; y la primera mujer, María Teresa Márquez, se clasificó séptima. Numeroso público siguió este acto, mientras ya las terrazas se encontraban llenas de personas de todas las edades, que degustaban la denominada «reina de los ríos», elaborada frita, con jamón y con otras condimentaciones, y muy bien presentada.

Luís Rey destacó el esfuerzo de los establecimientos colaboradores, que adquirieron entre 80 y 90 kilos cada uno para repartir entre su clientela.

Durante la jornada hubo además pasacalles, juegos populares, talleres, música tradicional, y una vez más ejerció como atractivo Troi, la mascota del Concello.

También se celebró una verbena, desde última hora de la tarde. Las actividades programadas este año tendrán un epílogo inesperado el día 24, víspera de la Ascensión, cuando será la actuación de las orquestas Panorama y Atenas: ambas intervendrán para ofrecer la verbena que se suspendió el sábado a causa de la lluvia.