Una familia de Buscás cierra con grandes piedras alrededor del monumento la plaza, sobre cuya titularidad existen discrepancias entre Catastro y Registro de la Propiedad
27 abr 2023 . Actualizado a las 10:24 h.Más de 20 días lleva cerrada a la entrada de vehículos, con piedras de gran tamaño, la plaza del crucero de A Rúa, en la parroquia de Buscás (Ordes). Un vecino del lugar señala que fue el pasado día 5, el miércoles de la Semana Santa, cuando recibió una llamada por parte de la Policía Local para que retirase su vehículo de la zona, al señalarle que se trata de una propiedad privada porque así consta en el Catastro.
Él retiró el coche, y asegura que a continuación dos vecinos de una misma familia procedieron a cerrar parcialmente la plaza con piedras de gran tamaño, añadiendo un par de triángulos de peligro que ya desaparecieron. Así permanece desde entonces, por lo que hace días presentó sendos escritos ante el Concello de Ordes y ante la Dirección Xeral de Patrimonio Cultural. En ellos demanda que se requiera a los dos familiares la retirada inmediata de las piedras de la plaza, y se inicie un expediente sancionador contra ambos por su acción; también quiere saber si la actuación del agente de la Policía Local que requirió la retirada de su vehículo se ajusta a derecho. Subraya que la plaza cercada se encuentra en el Camino Inglés, indicando que se afecta además del crucero a la iglesia de origen románico de San Paio de Buscás, al castro de A Rúa, a los restos de una torre medieval y a una vivienda catalogada.
El crucero es propiedad del arzobispado, y la clave es la titularidad del terreno. En sus escritos, el vecino señala que es municipal «por cuanto así consta tanto en el planeamiento municipal en vigor (normas subsidiarias de planeamiento) como en el PXOM aprobado provisionalmente». Recuerda además que en 1999 el Concello reformó la plaza, «lo cual no sería posible si esta no fuese de titularidad municipal». Y concluye con un dato que es clave: la nota simple del Registro de la Propiedad no coincide con lo que figura en el Catastro, y así se comprueba al revisar los linderos del terreno.