La jueza decreta que el detenido por el crimen de un dominicano en Ordes siga en prisión

Xurxo Melchor
Xurxo Melchor SANTIAGO

ORDES

PACO RODRÍGUEZ

La Guardia Civil tomó muestras de ADN en la casa de su madre que permitieron esclarecer el caso

24 may 2019 . Actualizado a las 07:35 h.

El detenido por el crimen en Ordes del dominicano Álvaro Paredes, de 24 años, volvió a prisión tras prestar declaración ante la titular del juzgado número 1 de la localidad. Julián Eduardo V. T., de 31 años de edad, está investigado por el homicidio que tuvo lugar en la madrugada del 16 de julio del 2016 en una zona sin urbanizar de la calle Compostela. Allí apareció el cuerpo del joven, que trabajaba como portero en una discoteca, con una herida de arma blanca en la zona de la clavícula que le seccionó mortalmente la carótida.

La investigación del grupo de Policía Judicial de la Guardia Civil de A Coruña que ha permitido la captura de Julián Eduardo ha sido fruto de un intenso trabajo. Él siempre figuró en la lista de sospechosos. En primer lugar, porque la propia víctima hizo poco antes de morir una llamada al instituto armado comunicando que había sido amenazado por él tras una pelea entre ambos. Pero también porque el arrestado, que es colombiano aunque disfruta de nacionalidad española y llegó a prestar servicio en el Ejército, se llevó uno de los dos teléfonos móviles que usaba Paredes.

La sospechas se transformaron en certezas cuando, un mes después de aquel 16 de julio, Julián Eduardo V. T. cogió un avión en Madrid con destino a Colombia y huyó de España. Lo hizo antes de que la Guardia Civil tuviese en su poder las pruebas que lo incriminaban de forma indiciaria, pero los investigadores no se detuvieron y siguieron estrechando el cerco.

De este modo, como en el cuerpo de la víctima habían hallado ADN de un varón desconocido, la jueza de Ordes autorizó que se recogieran muestras genéticas en la casa de la madre del sospechoso, situada en Santiago. Los resultados fueron concluyentes y determinaron que los restos biológicos encontrados en la víctima eran de Julián Eduardo.

Fue entonces cuando se dictó su orden internacional de busca y captura y en mayo del 2018 se le detuvo en Colombia, en la zona de Cali. Inmediatamente se solicitó su extradición a España, trámite que se puedo cumplimentar hace ahora dos semanas. Como marca la ley en estos casos, el arrestado pasó primero a disposición de la Audiencia Nacional en Madrid, por lo que fue internado en Soto del Real. Ahora seguirá a la espera de juicio en la cárcel de Teixeiro.