La tramitación de tres nuevos parques eólicos dispara la alarma en la comarca de Ordes
ORDES
La coordinadora contra la instalación de aerogeneradores destaca su cercanía a los núcleos rurales
14 nov 2018 . Actualizado a las 10:49 h.La comarca de Ordes expresó el pasado mes de mayo con un acuerdo de los concellos que la integran su rechazo a convertirse en una zona de aprovechamiento eólico. Su manifiesto surgió a raíz de la tramitación de varios proyectos para instalar aerogeneradores en una extensión de gran riqueza ganadera y muy cercana la Camino Inglés.
Tras este mensaje de unidad, la coordinadora vecinal contra estos parques denunció ayer que la Xunta tiene sobre la mesa nuevas peticiones para instalar 33 aerogeneradores repartidos en los parques Legre, Solpor y Meirama, ubicados en los municipios de Ordes, Frades y Mesía.
El colectivo señaló que tuvo conocimiento de forma casual de las nuevas tramitaciones, por lo que decidió dar la voz de alarma para combatir los nuevos proyectos, que están en fase de tramitación administrativa
Un representante de la plataforma vecinal, junto con los regidores de Ordes, José Luis García; Frades, Antonio Pereiro; y Mesía, Mariano Iglesias Castro, mantuvieron una reunión en la Consellería de Industria para obtener información sobre los nuevos proyectos.
Y según confirmó el Concello de Ordes, la información que recibieron es que en estos momentos solamente están presentadas las solicitudes, aunque esto no impide que el gobierno ordense mantenga su veto.
La coordinadora vecinal alerta de que «a proximidade de todos estes parques suxiren no plano a idea dun só mega parque eólico, e que a súa fragmentación é intencionada para eludir mellor os impactos no medio ambiente e na sociedade nunha tramitación separada, o que é completamente ilegal, como declarou o Tribunal Supremo».
El colectivo vecinal recuerda a la Xunta que reconoció a la comarca ordense la declaración de área de Interese Agrario y que los tres parques proyectados ahora, siendo dos de ellos una reorganización de proyectos anteriores, están muy próximos a núcleos rurales, por lo que no se cumple la recomendación de distancia mínima de cinco kilómetros entre las viviendas y los aerogeneradores previstos.